COMPROMÍS SE QUEDA SOLO

PSOE y PP se alían en la Diputación de Castellón contra la tasa turística de Puig, Oltra y Podemos

Ley de cambio climático del Gobierno de Ximo Puig
El presidente de la Generalitat Valenciana el socialista Ximo Puig.
Ignacio Martínez

Partido Popular y PSOE han votado en el Pleno de la Diputación de Castellón a favor de una moción contra la tasa turística que en territorio valenciano quiere implantar el gobierno autonómico que conforman los propios socialistas con Compromís y Podemos. En esta ocasión, el PSOE ha dejado solo, en defensa de esa tasa, a Compromís, su socio de gobierno. El otro grupo con representación en la institución provincial, Ciudadanos, ha respaldado a PP y PSOE.

Nunca hasta ahora se había visualizado la soledad de Compromís en una institución como ayer en la Diputación de Castellón. Los de Mónica Oltra se quedaron solos en su apoyo a la tasa turística. Sus socios, los socialistas apoyaron una moción que rechaza esa tasa y que fue presentada por el Partido Popular y sustentada también por Ciudadanos.

La tasa turística es un impuesto para gravar las pernoctaciones que ya está en vigor tanto en Baleares como en Cataluña. Se trata, por tanto, de un impuesto que los nacionalistas quieren implantar en toda la extensión de esos imaginarios países catalanes. La citada tasa gravaría las pernoctaciones en hoteles y apartamentos turísticos en territorio valenciano. A ella, se opone el sector turístico, al igual que el PP, Ciudadanos y Vox. Está impulsada por Compromís y Podemos. En vísperas de la aprobación de los presupuestos autonómicos valencianos para este año 2022, los socialistas accedieron a apoyar la tasa con una serie de matices. El acuerdo se presentó como un punto de partida que debía culminar con su implantación pero, en todo caso, sería municipal y voluntaria.

Ayuntamientos como Alicante, Benidorm y Torrevieja ya anunciaron que si de ellos dependía, la tasa no se implantará. Sin embargo, ahora es una institución en la que los socialistas comparten gobierno con Compromis la que se posiciona decididamente en contra de ella. La moción del PP se fundamenta en dos cuestiones: una, que la provincia de Castellón ha perdido en 2021 hasta medio millón de turistas, los mismos que visitan la localidad castellonense de Peñíscola en un solo año. Otra, que el sector turístico es uno de los más azotados por la pandemia y que muchos establecimientos han tenido que cerrar.

El PSOE no sólo se sumó a esas tesis, sino que utilizó, incluso, algunos argumentos usados por el presidente del Gobierno valenciano el también socialista Ximo Puig en otros momentos, tales como la inoportunidad de establecer la tasa a día de hoy con la incertidumbre que genera la crisis sanitaria. No la descartaba a largo plazo, pero debía ser una decisión de cada ayuntamiento.

Lo cierto es que la moción del PP instaba al Gobierno de Puig, Oltra y Podemos a no implantar la tasa en la Comunidad Valenciana y a consensuar con el sector turístico todas las medidas presentes y futuras. Le instaba también a que cualquier decisión en esta y otras materias que atañen a los ayuntamientos se adopte en el seno de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias y acordaba trasladar el acuerdo a los grupos políticos en las Cortes Valencianas, a las organizaciones empresariales y a las empresas turísticas. Queda por ver ahora qué consecuencias tiene la decisión de los socialistas para el futuro del Gobierno de la Diputación castellonense e incluso para la Generalitat Valenciana.

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