Estrés vacacional

Dr. Javier Schlatter, psiquiatra: «La depresión postvacacional es una reacción adaptativa natural»

El especialista recuerda además que el entorno veraniego influye en el estado emocional

depresión postvacacional
Javier Schlatter, especialista del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Navarra.
Diego Buenosvinos

Fact checked

×

Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.

Javier Schlatter, especialista del Departamento de Psiquiatría y Psicología Clínica de la Clínica Universidad de Navarra (CUN) en Madrid, subraya que la llamada depresión postvacacional, habitual en septiembre con el regreso generalizado de las vacaciones, no constituye un trastorno clínico, sino «una reacción adaptativa natural».

«Se trata de un descenso transitorio del ánimo provocado por el brusco cambio entre el ritmo relajado de las vacaciones y las exigencias de la vida laboral o académica», explica. Lo que muchas personas denominan «la cuesta de septiembre» suele resolverse «de manera espontánea con el paso de los días». Para afrontarla, desde la CUN destacan la importancia de planificar bien antes, durante y después de las vacaciones, retomar la rutina de forma progresiva y procurar mantener horarios y hábitos similares.

El especialista recuerda además que el entorno veraniego influye en el estado emocional. La luz solar ejerce un efecto beneficioso sobre el ánimo, pero las altas temperaturas, como las registradas en agosto, pueden tener el efecto contrario. «El calor extremo no genera trastornos mentales, pero sí puede ocasionar cansancio, alteraciones del sueño o sensación de baja energía, con impacto en el bienestar general», precisa el doctor.

Motivación o rendimiento

También alude a la astenia veraniega, un síndrome caracterizado por fatiga persistente sin causa médica clara, que «no implica necesariamente tristeza, aunque puede afectar a la motivación o al rendimiento». De ahí la importancia de «diferenciar una falta puntual de energía de un problema de salud mental más complejo».

Para prevenir o mitigar estas situaciones, Schlatter aconseja concebir el verano como «un auténtico espacio de descanso». La desconexión, señala, debe ser integral: no solo del trabajo, sino también de la sobreexposición digital. «Reducir el tiempo en redes sociales o evitar el exceso de información favorece una relajación real», apunta. Fomentar aficiones, flexibilizar horarios y reservar momentos de ocio «sin prisas» ayuda a lograr un reposo de calidad.

El especialista advierte además sobre el estrés prevacacional, que puede dejar «huella emocional». La acumulación de tareas antes de las vacaciones y la presión por «desconectar perfectamente» generan tensión añadida. «Planificar es positivo, pero no todo se puede controlar. Adoptar una actitud flexible y realista es esencial tanto para disfrutar de las vacaciones como para retomar la rutina sin frustraciones», concluye.

Lo último en OkSalud

Últimas noticias