Shakshuka con garbanzos, espinacas y queso fresco

El shakshuka es un plato originario de Oriente Medio, su nombre significa mezcla en árabe. Se prepara a base de huevos pochados en salsa de tomate y vegetales como la cebolla. Es parte de la gastronomía de países como Israel y Palestina.  Al expandirse se han creado variaciones de la receta, como cambiar los huevos por tofu o algunos vegetales por otros. En este caso, vamos a analizar el paso a paso del shakshuka con garbanzos, espinacas y queso fresco, una combinación exquisita que debemos probar. Aunque parece una elaboración un poco compleja, en la práctica es muy sencilla de hacer en casa, con ingredientes cien por cien naturales.

Los garbanzos son una de las legumbres con más beneficios que existen. Son ricos en vitamina E, que es un antioxidante que protege las células del daño ocasionado por los radicales libres. Aportan fibra, que sacia el apetito y mejora el tránsito intestinal. También poseen una gran cantidad de minerales como el magnesio, fósforo, hierro, zinc y cobre.

La espinaca es un alimento con múltiples vitaminas y minerales esenciales para el buen funcionamiento del organismo. Es una potente fuente de vitaminas A, C, K, así como ácido fólico, importante durante el embarazo. Mejora la salud visual y la de los huesos. Otros de sus componentes son el manganeso, hierro y el magnesio.

Ingredientes:

Cómo preparar shakshuka con garbanzos, espinacas y queso fresco:

1. Precalentamos el horno a 190 grados.
2. Pelamos la cebolla y picamos en julianas.
3. Calentamos un poco de aceite en una sartén. Agregamos la cebolla y cocinamos durante unos cinco minutos o hasta que se comiencen a ablandar.
4. Machacamos los ajos e incorporamos a la sartén.
5. Agregamos el pimentón dulce y una cucharadita de pimienta.
6. Cortamos la guindilla roja en trozos finos, retiramos las semillas y añadimos con la cebolla y los ajos.
7. Cocinamos unos dos minutos más antes de incluir los tomates. Seguimos rehogando hasta que los tomates se cocinen por completo.
8. Incorporamos los garbanzos, el azúcar y las espinacas. Salpimentamos al gusto y cocinamos sin dejar de remover.
9. Después de unos siete minutos aproximadamente servimos en tres moldes aptos para horno.
10. Rompemos dos huevos en cada uno y terminamos con el queso feta desmenuzado.
11. Horneamos durante unos 20 minutos y servimos con pan.

Esta rica receta árabe es ideal para que la disfrutes en cualquier ocasión. La shakshuka con garbanzos, espinacas y queso fresco es toda una delicia que no te puedes perder.