Ayuso destroza a la izquierda con su plan de medidas sociales

Ayuso destroza a la izquierda con su plan de medidas sociales

La secuencia es la siguiente: Isabel Díaz Ayuso anuncia en su discurso de investidura rebajas fiscales por importe de 300 millones de euros, que beneficiarán, sobre todo, a los sueldos más bajos, así como que las madres de menos de 30 años recibirán 500 euros mensuales desde el quinto mes de embarazo hasta que el niño cumpla dos años. A continuación sale en tromba la izquierda diciendo que les parece poco y, en el colmo del delirio, la candidata de Más Madrid, Mónica García, asegura que la ayuda a la maternidad afectará sólo a familias «de pedigrí», pues la medida beneficiará a las madres que lleven al menos diez años empadronadas en alguno de los municipios de la Comunidad de Madrid. Dice García que los requisitos son como «las siete pruebas de Astérix». O sea, que las medidas de Ayuso le parecen pocas y mal. ¿Y las medidas de Pedro Sánchez? El Gobierno sube los impuestos y no concede ayuda alguna a la maternidad, pero la izquierda guarda un silencio cómplice. La hipocresía de esta gente es de aurora boreal. Lo que ocurre es que Díaz Ayuso ha adoptado un paquete de medidas sociales de verdad, de las que llegan a la gente, no como ese «escudo social» del que presume el Gobierno socialcomunista, puro cartón piedra.

Según los cálculos del Gobierno de la Comunidad de Madrid, las ayudas a las mujeres embarazadas beneficiarán a entre 12.000 y 14.000 personas, algo que le parece poco a Mónica García. Lo de que sólo afectará a familias de «pedigrí» es para nota. ¿Qué habrá querido decir Mónica García? ¿Es que le parece mal que para acogerse a las ayudas haya que estar empadronado en Madrid? Resultan patéticas las críticas de esta mujer, así como los reproches del resto de las filas socialcomunistas.

Es la prueba del nueve de que Ayuso les ha vuelto a ganar por la mano con un plan de ayudas sociales sustanciado en medidas concretas. No como las socialcomunistas, que vienen envueltas primorosamente, pero que al abrirlas no hay nada de nada.

Lo último en Opinión

Últimas noticias