Vox tendrá una Vicepresidencia del Congreso y C’s no si los de Arrimadas sólo tienen los votos del PP
Vox está a un paso de conseguir este martes una Vicepresidencia en la Mesa del Congreso de los Diputados. Y es que, pese a los avisos de cordón sanitario lanzados desde la izquierda y el separatismo, la falta de acuerdo en ese bloque provocará que los 52 votos de Vox valgan para que una de las 4 Vicepresidencias del Congreso acabe en manos de los de Santiago Abascal. C’s -con sus 10 votos- sólo podría adelantar a Vox si contase con más votos que los que le puede prestar el PP. Y, a estas horas, la falta de acuerdo en las filas de la izquierda para cerrar acuerdos estratégicos para aislar a Vox, y la falta de pactos cruzados entre C’s y el PSOE, deja a la formación naranja con todas las papeletas para perder su actual Vicepresidencia en la Mesa y que sea Vox el que se la quede.
Meritxell Batet tiene garantizada su posición de presidenta del Congreso con los votos del PSOE y los de Podemos. Pero el resto de puestos de la Mesa del Congreso se reparten este martes en una dura votación secreta donde la estrategia puede jugar grandes bazas.
El PP ha anunciado que está dispuesto a ceder parte de sus 89 votos para que entre Ciudadanos. Los de Pablo Casado, además, han pedido el respaldo de Vox para abrir las puertas a los naranjas, respaldo que ha sido negado por los de Abascal desde el primer momento. Y lo cierto es que con sus 10 escaños, C’s necesita más apoyos que sólo los del PP y Navarra Suma (otros 2 diputados) para superar a Vox. ¿Por qué? Porque la formación de Abascal cuenta con 52 escaños y todos ellos van a votar la candidatura de Vox para lograr una de las Vicepresidencias del Congreso y una de las Secretarías.
De ese modo, si el PP, más C’s, más Navarra Suma aglutinan votos e intentan aupar a C’s por encima de Vox, lo cierto es que deben dividir un total de 101 votos entre dos puestos -el que pretende obtener el PP y el de C´s-. Y eso implica que nunca podrían superar ambos de forma simultánea a los 52 de Vox sin apoyos externos. Y a estas horas, esos supuestos apoyos ajenos no existen. Resultado: Ignacio Prendes, último vicepresidente de C’s en la Mesa del Congreso, tiene todas las papeletas para ver cómo ese puesto es ocupado ahora por un miembro de Vox.
Pablo Casado ha cerrado este pasado lunes las deliberaciones y discusiones sobre el apoyo en la Mesa y ha ordenado que su partido apoye a Vox en la Mesa del Congreso y en la Mesa del Senado. Pero con la condición de que, a cambio, los de Abascal respalden la entrada de Ciudadanos en la Mesa.
Esta última condición, sin embargo, ha sido rechazada de plano por Vox. Ciudadanos ha mantenido una reunión con Vox y tras el encuentro, se ha comunicado la falta de acuerdo, por lo que Vox no prestará sus votos a la formación naranja.
Y es que los de Abascal van a jugar la baza de que, si nadie más vota a C’s, el puesto en una de las vicepresidencias para Vox cuenta con grandes papeletas de salir adelante.