Sánchez dice que su mayoría con Podemos, ERC y Bildu representa «la España que quiere avanzar»
El candidato a la investidura, Pedro Sánchez, ha anunciado una reforma de la ley para "evitar situaciones de bloqueo". Sánchez será investido previsiblemente este martes por un estrecho margen
El candidato a la investidura, Pedro Sánchez, considera que su Gobierno socialcomunista, con Podemos, y apoyado por los independentistas de ERC y los proetarras de Bildu, es reflejo de la «voluntad» de los españoles. Es más, que «representa a la España que quiere avanzar».
Así lo ha manifestado Sánchez en la sesión de investidura, en el Congreso, en vísperas a la votación que, previsiblemente, le hará presidente por un estrechísimo margen: sólo un voto.
En su intervención ante el pleno, el socialista ha anunciado una reforma de la ley para «evitar situaciones de bloqueo» y ha considerado que «es inadmisible que una situación así se repita en el futuro». En este contexto, ha avanzado que «una vez concluya esta sesión será el momento oportuno para buscar mecanismos para que ese vacío no se vuelva a producir».
El socialista ha opinado también que «es inadmisible que una situación así se prolongue un día más en nuestro país».
El presidente en funciones ha arremetido en su intervención contra la «coalición variopinta» en la que, ha dicho, «figuran desde la derecha a los partidos antisistema». «Es la España que bloquea, sin alternativa», ha opinado.
«Comprendo su frustración, lo han intentado en cinco ocasiones y han fracasado», ha dicho, en un alud de sistemáticos reproches. Las descalificaciones de Sánchez han provocado las críticas de las bancadas del PP, a lo que el socialista ha respondido: «Tengan un poco de nivel democrático». Sánchez será investido, salvo sorprensa, gracias a la abstención de los independentistas de ERC y los proetarras de Bildu. «Es la única alternativa de gobierno posible», ha defendido.
Tras fracasar en la primera votación en el Congreso, el domingo, Sánchez será investido previsiblemente este martes gracias a una diferencia mínima. El socialista precisa esta vez de una mayoría simple, es decir, más ‘síes’ que ‘noes’.
El estrecho margen -el cambio de un sólo diputado provocaría el fracaso de la investidura- ha provocado que el PSOE haya impuesto un control férreo sobre sus diputados, obligándoles a pasar en Madrid la víspera a la sesión plenaria o sometiéndoles a un control de firmas, a su llegada este martes al Congreso, para asegurarse de su presencia en el hemiciclo.