Tribunales

Un pederasta que abusó de su sobrina se libra de dos años de cárcel gracias a la Ley Montero

La ley del 'sólo sí es sí' rebaja la condena de un violador que abusó de una niña de 13 años en el domicilio familiar

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Un pederasta que abusó de su sobrina menor de edad se libra de dos años de cárcel gracias a la Ley del sólo sí es sí impulsada por la ex ministra de Igualdad Irene Montero. El Tribunal Supremo –en aplicación del texto legal que está causando una cascada de rebajas de pena– ha reducido de ocho a seis años la condena dictada por la Audiencia Provincial de Orense. La Sala de lo Penal del Alto Tribunal ha estimado el recurso interpuesto por la defensa del violador, que ha solicitado la revisión de su condena para que le fuera aplicada la nueva ley de Montero.

El 21 de junio de 2021 la Sección 2ª de la Audiencia Provincial de Orense condenó a prisión a un hombre mayor de edad por agredir sexualmente a su sobrina durante su adolescencia. Su defensa recurrió en apelación el fallo ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Galicia, que desestimó el recurso ratificando la condena de ocho años cárcel, así como la medida de libertad vigilada durante cinco años y la prohibición de acercarse a su víctima a menos de 300 metros durante una década.

La defensa del condenado continuaba defendiendo su inocencia a pesar del fallo y, en aras de la aprobación del texto legal impulsado por Irene Montero, la recurrió en casación ante el Supremo. Los togados del Alto Tribunal dejaron sin efecto la pena impuesta. La Sala le declaró culpable de un delito de agresión sexual, pero le rebajó la pena a seis años de prisión y once años de inhabilitación para ejercer cualquier profesión o participar en actividades que conlleven el contacto directo con menores. 

En el domicilio familiar

Los abusos sexuales se produjeron el día 24 de diciembre de 2018, en Nochebuena, en el domicilio familiar de los padres de la menor ubicado en Ourense. El pederasta tenía entonces 21 años y decidió abusar de su sobrina de 13. Ambos dormían en habitaciones contiguas y el violador aprovechaba las noches para perpetrar las agresiones. 

«Se introdujo con ella en su habitación, se acostó a su lado y comenzó a tocarla en todo el cuerpo, para a continuación desnudarla, bajarse él los pantalones y tras ir a buscar un preservativo a su habitación, penetrarla vaginalmente sin que la menor opusiera resistencia por la vergüenza que le daba lo que estaba ocurriendo o por el miedo que tenía a su tío», relata la sentencia a la que ha tenido acceso OKDIARIO. 

Secuelas psicológicas

La víctima del pederasta sufrió importantes secuelas psicológicas tras los abusos. La niña ha estado en tratamiento psicológico durante años por estos hechos y ha estado medicada con antidepresivos. Además, durante el proceso judicial, la menor se sometió a un estudio psicológico forense que detalla la factura psicológica de haber sido una víctima de agresión sexual.

Los forenses evidencian que la chica «muestra sintomatología reactiva a la situación vivida con nerviosismo y estado de ánimo depresivo». Añaden que la joven presenta un «estilo atribucional interno en cuanto a la responsabilidad del delito presentado con relación al acusado una relación de dependencia de tipo emocional, ya que la niña consideraba a su tío como la persona a quien podía confiar los problemas relacionados con la convivencia con sus padres». 

«En el plano afectivo, a nivel general, impresiona eutimia aunque en ocasiones su discurso no es congruente con la expresión emocional, sonriendo de manera constante ante el relato del supuesto abuso llevado a cabo por su tío (lo que entra en contradicción una vez más con la persistencia de la declaración), mostrándose desenvuelta en la narración de los hechos», explican los facultativos. Y prosiguen: «Sin embargo, muestra gran reactividad emocional cuando le solicitamos que relate el supuesto abuso sufrido en el hospital, la niña se bloquea y se niega a dar detalles sobre el mismo». 

Pese a estar en tratamiento en psicológico, tomar antidepresivos y haber sufrido abusos sexuales siendo menor de edad por parte de su tío, la ley impulsada por Irene Montero no le ha beneficiado. Gracias a este texto legal, que fue el principal hito de su legislatura al frente de Igualdad, este pederasta ha conseguido rebajar su pena en dos años. Ahora, tan sólo tendrá que cumplir seis años en prisión.

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