Marchena para los pies al abogado de Turull por manipular el parte de lesiones de un guardia civil
Jordi Pina, abogado de los imputados por el 1-O Josep Rull, Jordi Turull y Jordi Sànchez, ha intentado manipular torticeramente el parte de lesiones de un guardia civil durante el interrogatorio al agente. Tras darse cuenta, al destapar el propio testigo la manipulación, el juez Manuel Marchena ha reprendido al abogado de los independentistas.
Los letrados de los 12 imputados por el 1-O tratan de hacer ver en el Tribunal Supremo que lo que sucedió el 1 de octubre de 2017 dista mucho del delito de rebelión y de sedición, por el que han sido acusados. Este miércoles, durante la declaración de un guardia civil herido en los violentos incidentes acaecidos en Cataluña, el abogado Jorge Pina ha intentado manipular el parte de lesiones presentado como prueba por la acusación.
«Usted fue a visitar el 2 de octubre al Centro Médico Sant Andreu. Recuerda si la doctora que le asistió reflejó exactamente: ‘Paciente de 35 años, guardia civil, refiere que en el transcurso de su trabajo sufrió diversas contusiones en ceja y espalda y, atención a esto, donde no objetivo hematoma ni tumefacción’», lee el letrado. Su intención era clara, invalidar la prueba en base al dictamen médico.
Sin embargo, es el propio agente el que le pide al abogado Jorge Pina que continúe leyendo el parte de lesiones. Se había olvidado lo más importante. «Pero refiere dolor a la palpación», realiza una pausa y el guardia civil le pide que continúe leyendo. «Y presenta hematomas en ambos brazos y piernas», lee Pina. El agente de la Benemérita indignado se dirige al tribunal : «Es que si leemos parcialmente…».
Es en ese momento cuando interviene el juez Manuel Marchena, presidente del Supremo para llamar, de manera contundente, la atención al abogado de los golpistas. «Señor letrado, si leemos el documento, lo leemos íntegro», asegura en un tono bastante duro y añade que «y si no lo leemos, esperamos a la prueba documental. Pero, por favor, no interroguemos sobre un documento fraccionándolo».
El abogado insiste, dirigiéndose al guardia civil, al que le pregunta si le «consta» lo que aparece en el parte médico. Es en ese momento cuando Marchena tiene que elevar el tono llamando la atención de nuevo al letrado. «Cómo no le va a constar, si lo ha manifestado él, señor letrado. Está usted preguntando sobre lo que él manifestó», concluye el magistrado. Viendo que la trampa no había funcionado, el abogado de los golpistas arroja la toalla y le dice al tribunal que no tenía más preguntas.