El Gobierno y los países del sur acuerdan negociar el Brexit por fases «para no minar el proyecto europeo»
El Gobierno de Mariano Rajoy y los líderes de los estados del sur de Europa acordaron este lunes en una declaración conjunta «unidad» frente al Brexit.
Los siete líderes defenderán una postura común en Bruselas para que la salida de Reino Unido sea negociada por fases y no en conjunto como demandan los británicos. Lo que implica un periodo de transición hasta alcanzar los términos pactados y no un ‘cortar por lo sano’ el 29 de marzo de 2019 (fecha límite propuesta para que dejen de aplicarse los tratados).
El Palacio de El Pardo albergó este lunes la tercera cumbre de jefes de Estado o de Gobierno del sur de Europa, a la que han asistido, además de Rajoy, el presidente de Francia, François Hollande; el de Chipre, Nicos Anastasiades; y los primeros ministros de Grecia, Alexis Tsipras, Italia Paolo Gentiloni, Portugal, Antonio Costa y Malta, Joseph Muscat.
La ciudadanía, lo primero
Los mandatarios unieron sus discursos sobre el Brexit tomando algunas decisiones que serán clave para el acuerdo en las líneas de negociación con Reino Unido. El primer ministro de Malta tomó la iniciativa, según dijo Hollande en rueda de prensa, para exponer su visión sobre lo que deberían ser las principales líneas de negociación de los 27 que tratarán en el próximo Consejo Europeo dedicado al Brexit.
El objetivo principal es que la negociación entre ambas partes sea por fases. Hay muchos intereses en juego, incluido el de la propia ciudadanía, y no se puede negociar la deuda a la vez que tratan de acordar cómo será la relación futura entre ambas potencias. «Los ciudadanos no pueden ser utilizados como moneda de cambio», dijo contundente el primer ministro de Malta.
La ciudadanía es la especial preocupación en Europa. ¿Tendrán los mismos derechos los españoles residentes en Londres que en estos momentos siendo ciudadanos europeos? Es una de las cuestiones que se plantean. Sin embargo y desde ambas partes ofrecen un discurso tranquilizador: «Los ciudadanos tienen que ser el centro de las negociaciones para el Brexit», dijo el primer ministro de Portugal, Antonio Costa.
La cuestión financiera
Por su parte, Hollande dejó entrever los asuntos a tratar en las fases de negociación con los británicos: «En primer lugar tiene que haber una fase para negociar el mercado interior común, para fijar en la segunda las futuras relaciones comerciales con Reino Unido. Todo ello sin olvidar la fase corta de transición».
Para ello apuestan por completar la unión monetaria y la unión bancaria. «Tenemos que compartir los riesgos. Cabe tener como perspectiva el bono euro o una unión bancaria fuerte y un presupuesto europeo fuerte. Es lo que hemos acordado debatir en la próxima cumbre en Chipre», explicó Tsipras.
«Nuestro mensaje es que el crecimiento tiene que ir acompañado con inversiones, políticas de empleo, un debate sobre las reglas de ajuste estructural. Nos interesa llegar a un marco con cifras positivas, acompañadas de logros sociales de forma que los ciudadanos se reconcilien con las dificultades que hemos vivido estos años de crisis», señaló el líder italiano Paolo Gentiloni.
Todos los mandatarios sumaron estas peticiones a las ya ratificadas en el Tratado de Roma, por ejemplo, en materia de seguridad, control de fronteras, lucha contra el terrorismo, la condición de los pueblos y la lucha contra el cambio climático (respetar el acuerdo de París). Asuntos que seguirán debatiendo en la cuarta cumbre que tendrá lugar para el otoño en Chipre.
Por lo pronto, la declaración conjunta establece que los siete dirigentes se comprometen a respaldar una hoja de ruta común de cara al próximo Consejo Europeo que tratará sobre el Brexit. Además, intentarán convencer al resto de socios europeos de que adopten sus líneas a la hora de fijar la relación sobre las futuras negociaciones con los británicos. «Queremos que Reino Unido siga siendo nuestra principal aliado. Aunque lamentamos su salida, respetamos la decisión», señalaron en sus discursos.