El coronel que le condecoró revela que Aldama y Koldo llevaban 15 años en la lucha antiterrorista
Audio de la declaración del coronel jefe de la UCE-2 de la Guardia Civil en la Audiencia Nacional
El coronel jefe de la UCE-2 (Unidad Central Especial número 2) de la Guardia Civil, Francisco José Vázquez Pape, confirmó esta semana ante la Audiencia Nacional el papel clave que jugaban Víctor de Aldama y Koldo García como colaboradores de su unidad de inteligencia. El ex asesor del que fuera ministro José Luis Ábalos mantenía una relación con la Guardia Civil desde 2009, iniciada en el marco de la lucha contra ETA, mientras que Aldama fue posteriormente introducido por el propio Koldo, como relata el alto cargo del Ministerio del Interior en el audio al que ha tenido acceso OKDIARIO.
«El señor Koldo García desde hace muchos años es colaborador o trabaja en la esfera o forma parte de la esfera de relación de la Jefatura de Información. Además, en el ámbito de la lucha contra el terrorismo de ETA», ha detallado el coronel, que ha destacado que esta relación se mantenía «en el marco de una unidad que no es ni siquiera la mía». A la pregunta concreta de si las personas estaban categorizados como colaboradoras, el coronel confirma: «Así es. Aunque sabe que somos tremendamente restrictivos a la hora de publicitar cuestiones tan señaladas de nuestros procedimientos, creo que negarlo en este caso sería no tener el contexto realmente de la relación».
El empresario Víctor de Aldama fue posteriormente introducido como colaborador por el propio Koldo García, siendo gestionado directamente por el comandante Rubén Villalba, quien dirigía «el departamento que tiene que ver con la relación con personas en el exterior, con los medios técnicos y con los equipos de vigilancia».
La importancia de ambos colaboradores era tal que se les proporcionaban teléfonos móviles especiales para mantener comunicaciones seguras con la unidad. El coronel ha justificado estas prácticas señalando que «es un procedimiento básico» y que en su caso no requerían protocolos especiales de seguridad al ser «una relación institucional en el marco de dos personas que se relacionan de una forma natural con el servicio».
El testimonio ante el juez Ismael Moreno ha revelado la delicada situación que se produjo cuando en julio de 2023 la unidad supo que Aldama estaba siendo investigado por la UCO, y posteriormente, en octubre, que Koldo García también era objeto de investigación. A pesar de ello, mantuvieron la relación con ambos colaboradores, llegando el coronel a reunirse con Koldo García el 21 de diciembre de 2023 para mantener «una relación de normalidad».
«En ningún caso entendíamos que nuestra relación con él [con Koldo] no pudiese continuar en los términos claros y concretos de nuestra relación, que era una relación absolutamente legítima, identificada», ha defendido el mando del Instituto Armado. No había, en sus propias palabras «ningún elemento de toxicidad». Además, agrega: «Lo que sí él ha evidenciado en numerosas ocasiones es estar en la creencia de que estaba siendo investigado, que estaba siendo seguido… y que ponía a disposición las llaves de su casa». A pesar de que quería colaborar con la investigación, la Guardia Civil asaltó su casa en Alicante con armas estando su hija de cuatro años dentro.
El coronel ha afirmado que ninguno de los dos colaboradores recibía compensación económica, asegurando que su única motivación era «la satisfacción de trabajar por un bien superior y en este caso por colaborar con la Guardia Civil». No obstante, ha reconocido que al menos Aldama recibió una medalla al mérito de la Guardia Civil a propuesta del comandante Villalba, actualmente investigado. También Koldo, como ha publicado OKDIARIO también la recibió.
El testimonio del coronel incluye explicaciones sobre unas conversaciones grabadas tras destaparse el caso, que ha calificado como «teatralizadas», asegurando que formaban parte de un procedimiento interno de compliance (protocolos de cumplimiento de las leyes). En estas grabaciones se discutían temas sensibles como posibles pagos en efectivo, la preocupación por «quién ha dado el chivatazo», la gestión de los teléfonos y las comunicaciones y el borrado de mensajes de WhatsApp. «Antes de la teatralización hay una reunión previa. Hay una identificación de qué personas tienen que participar en esa reunión, cuáles son los roles que vamos a ocupar cada uno de ellos y si está,guionizado o no. Evidentemente no hasta el mínimo detalle, pero sí que había un concierto previo».
Por otra parte, el coronel jefe detalla la antigüedad de su implicación en temas sensibles: «Yo tengo referencias porque mi anterior desempeño desde el año 1995 está en el ámbito de la lucha contra ETA durante 20 años. Entonces, el conocimiento de su existencia [de Koldo] y de su relación con esa unidad es desde sus inicios.»
En otro pasaje indica: «Las actividades de las unidades como las nuestras son tremendamente heterogéneas y tremendamente poco tradicionales. Entonces, a lo mejor en el marco de las funciones de otro Guardia Civil le puede parecer realmente o extremadamente extraño alguna de las cosas que se ponen de manifiesto aquí». Todo ello al hilo de la controversia por los teléfonos ultraseguros que daba a la trama Villalba y por lo que supuestamente recibía dinero. Sobre la entrega de teléfonos ha expuesto: «Es un procedimiento que única y exclusivamente ampara al uso entre el agente y la persona con la que se relaciona. Es un procedimiento que es un procedimiento de protección individual de la gente, por decirlo de una manera».
En relación al chivatazo dice: «Se nos comunica que hay una persona, en este caso el comandante Rubén Villalba, que está, creo recordar en la textualidad de aquello, que está en el círculo de relación de una persona de interés para la UCO». La investigación abierta tratará de aclarar ese y otros extremos del caso.