Rumí sobre el asalto a la valla de Ceuta: «Al Gobierno no le gustaron las devoluciones en caliente»
A pesar de la avalancha migratoria, e incluso hablando de el asalto violento a la verja de Ceuta de la semana pasada en la que más de 600 inmigrantes atacaron con cal viva y excrementos a los guardias civiles, la secretaria de Estado de Migraciones, Consuelo Rumí, ha centrado el debate en que el Gobierno de Pedro Sánchez no ve bien las devoluciones sumarias que realizaron los agentes aquel jueves 26 de julio.
En lugar de poner en valor el cumplimiento de la obligación de defender los pasos fronterizos de la Guardia Civil, Rumí ha apostado por revisar esta medida prevista en la Ley de Seguridad Ciudadana.
La secretaria de Estado ha recordado que «las devoluciones en caliente nunca se han visto ajustadas a la política de inmigración seria y socialista» que defiende el Gobierno Sánchez por lo que ha defendido llevar a cabo una revisión «de todo lo que tiene que ver con esta normativa y ajustarlo a lo que se viene defendiendo [desde el PSOE]».
Esta práctica —también conocida como devolución en caliente— es una medida recogida en la Ley de Seguridad Ciudadana que ampara la devolución sumaria a Marruecos de los migrantes interceptados en el salto de las vallas de Ceuta y Melilla bajo la figura jurídica del ‘rechazo en frontera’. Fue puesta en marcha en abril de 2015, con el Gobierno de Mariano Rajoy al frente.
En una entrevista en la Cadena Ser recogida por Europa Press, Rumí negó inicialmente que se hubiesen realizado devoluciones sumarias en la frontera ceutí tras el salto de varios centenares de migrantes al vallado fronterizo.
«Me remito a las palabras del Ministerio de Interior, no eran devoluciones en caliente porque no estaban en territorio español», ha respondido Rumí para posteriormente matizar sus palabras al recordarle la existencia de un video en el que aparecen dos migrantes que son devueltos a territorio marroquí en contra de su voluntad y entre lamentos. «Yo no estaba allí», ha precisado Rumí y se ha referido de nuevo a las explicaciones realizadas desde el Ministerio del Interior, según las cuales las devoluciones se ajustaron a la legalidad».
La secretaria de Estado ha defendido la necesidad de respetar la legalidad vigente y los derechos humanos de las personas que llegan a territorio español, aunque también ha admitido su rechazo a las prácticas llevadas a cabo por los migrantes que atravesaron la fronteras de Ceuta. «No me parece bien el asalto que tuvimos en Ceuta, ésa no es la fórmula más correcta para atravesar nuestras fronteras y herir a la fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado», ha indicado.
La responsable de migraciones ha admitido que en los próximos meses se espera un repunte de la llegada de personas a las costas españolas que ha relacionado con el cambio de rutas ante lo que ha reclamado mayor cooperación con los países africanos.
Rumí ha admitido que la situación de los servicios de atención a los migrantes en el sur de la península es «compleja» ante el incremento de llegadas de pateras y ha asegurado que se ha realizado «un esfuerzo titánico para poder habilitar un albergue en Chiclana, para hacer las derivaciones correctamente y empezar a trasladar a las personas».