Joaquín Parra se remite a la Justicia pare salvar al Badajoz de Lanuspe: «Han llevado al club a la ruina»
Detrás del desplome del Badajoz se esconde una cadena de malas decisiones empresariales y promesas incumplidas
Así es como expropiaron a Joaquín Parra el Badajoz con una compra ficticia y una devolución pendiente
Joaquín Parra, ex dueño del Badajoz: «A Oliver hay que pararle, es el jefe de una banda criminal»


El Club Deportivo Badajoz vive una de las etapas más oscuras de su historia reciente. De rozar el ascenso al fútbol profesional y firmar gestas en la Copa del Rey, ha pasado a luchar por su supervivencia institucional y deportiva en la Tercera RFEF, la quinta categoría del fútbol español. Detrás de este desplome se esconde una cadena de malas decisiones empresariales, figuras controvertidas y promesas incumplidas que han dejado al club al borde del colapso.
Todo se remonta al pasado 27 de julio de 2021 cuando el empresario Joaquín Parra, propietario del Badajoz por aquel entonces, se vio obligado a vender el club pacense al polémico grupo empresarial Lanuspe por tan solo 1,5 millones de euros, una cantidad muy por debajo de su inversión inicial, al encontrarse bajo presión y con amenazas dirigidas a su familia. Este hecho pilló totalmente por sorpresa a toda la ciudad, pues bajo el mandato de Parra -una persona muy querida en Badajoz- el equipo vivió su momento de mayor esplendor desde su refundación en 2012: récords de abonados, crecimiento de la masa social, y una histórica actuación en la Copa donde eliminaron a clubes como Las Palmas y Éibar, antes de caer en octavos ante el Granada.
Cabe decir que bajo el nombre de Lanuspe se encuentra al mando Luis Oliver, conocido por su historial cuestionable en la gestión de clubes como Betis, Jerez, Córdoba o Extremadura. A pesar de estar condenado e inhabilitado para administrar patrimonio ajeno por una sentencia de la Audiencia Provincial de Sevilla, Oliver asumió de facto el control del Badajoz. Sin embargo, su entorno empresarial empezó a acumular deudas y promesas incumplidas: no se completó el pago acordado por la compra, no se registraron las garantías hipotecarias, y el supuesto patrocinio de criptomonedas jamás se materializó.
La lucha de Parra por recuperar el club
El ex dueño del equipo pacense ha aparecido en escena para anunciar que va a tomar medidas legales para recuperar el Badajoz después de que Lanuspe no haya cumplido con los plazos en los pagos de las acciones de la entidad blanquinegra: «En septiembre tienen que realizar el último pago, el cual no van a hacer. Ellos pretenden acometer ahora una reducción de capital de cuatro millones y medio a 4.500 euros. Después, como tienen un 99,75% de las acciones gracias a mí, pues automáticamente hacen una ampliación de capital de entre uno y dos millones con dinero de acreedores de préstamo, donde yo me quedo con menos del 1%», denuncia el empresario a OKDIARIO.
«Lanuspe ha estafado al propio juzgado. Supuestamente habían mandado ya que tenían los avales y una garantía inmobiliaria que evidentemente no existen, son falsas. Todo lo que han hecho es mentir y mentir desde que aterrizaron en el club en 2021, dejando al Badajoz lleno de deudas, abandonado y en la ruina», agrega Parra.
«No hay ni un sólo club o empresa que ellos hayan salvado de todas las que han comprado. Son expertos en liquidar empresas, y lo que se ve desde fuera es que el Badajoz es otro más en la lista. ¿Hasta cuando esta gente va a estar ahí? ¿cuando un juzgado le van a parar los pies para evitar que salgan de todos lados impunes?», afirma el ex propietario.
Parra: «Tengo unos socios que entrarían conmigo»
El ex dueño del Badajoz solicita que le devuelvan el control y las acciones del club. En la venta, aprobada por el juzgado, se recoge claramente que «el impago de que cualquiera de las cantidades pactadas por el comprador suponga la resolución del contrato y que vuelva la titularidad de las acciones, representativas del 99,75% del capital social de la sociedad Club Deportivo Badajoz S.A.D., al vendedor».
Por este motivo, y habiéndose incumplido el contrato, ya que no se ha pagado la cantidad de la venta, el Badajoz debería volver a ser propiedad de Parra, que pelea por ello, para que le devuelvan lo que es suyo. El empresario solicita que el alcalde de la ciudad, Ignacio Gragera (PP), le atienda para solucionar este asunto en su intento por revertir lo ocurrido desde que dejó la entidad.
«Espero que el juzgado resuelva esa ampliación de capital a mi favor para intentar recuperar el club. Tengo unos socios que entrarían conmigo para volverlo a sanear. De hecho, cuando a mí me sacan de allí, el club no tenía deuda alguna. Toda la deuda que existe en el concurso es generada por ellos posterior a mi venta. Me gustaría que el juzgado los persiguiera por estafa y lo hicieran responsables de toda la ruina que han generado», explica Parra.
Engaños en el proceso de venta
Parra anunció públicamente el engaño que sufrió durante la venta de Badajoz, cuyo caso es el reflejo de cómo el fútbol, cuando cae en manos de gestores irresponsables y oportunistas, puede verse arrastrado por una espiral de caos institucional, financiero y deportivo. De hecho, Lanuspe todavía tiene que efectuar dos pagos a Parra por la compraventa de sus acciones. En septiembre de 2024 estaba fijado el penúltimo plazo de la compra del Badajoz a la sociedad de Joaquín Parra cifrado en 350.000 euros, pero Lanuspe anunció la solicitud de una moratoria que prorrogaba este pago por seis meses.
A finales del mes de marzo de este año, una vez cumplido ese tiempo, el club comunicó que no efectuaría dicho pago hasta que el órgano judicial se pronunciara sobre su solicitud. Tras muchos vaivenes, se acerca de nuevo el mes de septiembre, donde está fijado que se efectúe el último pago, cifrado en la misma cantidad del anterior, sumando un total de 700.000 euros.
La entidad blanquinegra, que hace apenas unos años soñaba con la Segunda División, hoy lucha por sobrevivir, mientras su afición observa con impotencia cómo el club se hunde entre pleitos, deudas y promesas rotas. Su historia reciente es un aviso para todo el fútbol español.