El puerto estrella del verano impulsa una histórica transformación que marcará un antes y un después
Reordenará sus 400.000 metros cuadrados para su integración con la ciudad
El plan incluye una escuela de vela y piragüismo con un centro de alto rendimiento

El puerto estrella del verano impulsa una histórica transformación que marcará un antes y un después con la modernización y reordenación del espacio portuario, que ya ha comenzado a dar sus primeros pasos para su fusión con la ciudad.
La capital que cada estío acoge las vacaciones de la Familia Real, Palma, se lanza de lleno a un ambicioso proyecto: el Plan Maestro de Integración Puerto-Ciudad que cambiará su fisonomía y función, posicionándolo como un motor clave para el desarrollo económico, social y medioambiental de Mallorca.
Palma que en 2015 fue elegida como la mejor «el mejor lugar para vivir del mundo» por el diario The Times de Londres, quiere recuperar su esplendor para revalidar la nominación. Por ello transformará en las próximas décadas, los 400.000 metros cuadrados de superficie portuaria con un nuevo modelo de puerto que se integre de manera fluida con la ciudad, promoviendo la sostenibilidad y mejorando la calidad de vida de los ciudadanos.
Una iniciativa que está basada en cuatro líneas estratégicas fundamentales. La primera de ellas, la diversificación del tráfico de mercancías y pasajeros, para optimizar el tráfico portuario: 18 millones de toneladas de mercancías y alrededor de 7 millones de pasajeros de línea regular, que se concentrarán principalmente en el dique del Oeste, el muelle de Poniente y los muelles comerciales.
La segunda línea, enfocada en la concentración de la industria náutica, busca reforzar el papel del puerto como un referente en el sector, con el dique del Oeste como centro neurálgico de la actividad industrial náutica.
Este sector agrupa a unas 800 empresas, genera una facturación anual de 1.100 millones de euros y da empleo a cerca de 5.000 personas, consolidándose como uno de los principales motores económicos vinculados al puerto.
En el muelle de Poniente se centralizará la actividad crucerística. Con más de 2 millones de pasajeros y unas 500 escalas anuales, el puerto de Palma se prepara para ofrecer una experiencia más fluida y agradable tanto a los turistas como a los residentes.
Integración Puerto- Ciudad
La integración Puerto-Ciudad es otro de los pilares de este proyecto. Los muelles comerciales, el muelle viejo (Moll Vell) y el Contramuelle-Mollet serán transformados en espacios accesibles para todos, promoviendo el uso público y ciudadano del entorno portuario. La zona contará con amplias áreas verdes, zonas recreativas y espacios para actividades sociales, culturales y educativas.
En este sentido, destaca la reubicación del Centro de Formación Profesional Dual Náutico-Pesquero, que permitirá ampliar significativamente el número de plazas y dar respuesta a una demanda formativa que actualmente multiplica por cinco la oferta existente. Además, se reserva un segundo edificio para titulaciones universitarias.
El proyecto incluye también la nueva escuela municipal de vela y piragüismo, la primera de estas características en Palma, concebida como centro docente y de tecnificación deportiva e integrada con un centro de alto rendimiento.
En los muelles comerciales y el muelle viejo (Moll Vell) se instalarán infraestructuras como la sede del Centro Oceanográfico de Baleares, la nueva sede del SOCIB —ya en funcionamiento—, un edificio de innovación náutica denominado Sand Box y un centro de transferencia del conocimiento. Todo el ámbito contará con espacios comunitarios de ocio al aire libre, amplias zonas verdes y áreas abiertas pensadas para el disfrute ciudadano.