El alcalde del PP de Palma acaba con el 80% del gasto que el PSOE destinaba a promocionar el catalán

El alcalde del PP de Palma, Jaime Martínez, acaba con el 80% del gasto de dinero público de los contribuyentes que el PSOE y sus socios separatistas de Més y Podemos han venido derrochando en las dos pasadas legislaturas, en la promoción del catalán.

Los primeros presupuestos del gobierno en minoría del PP en la capital balear para 2024 que han sido negociados con sus socios programáticos de Vox, dejan reducida a su mínima expresión estas partidas lingüísticas.

Apenas 24.000 euros frente a los 126.000 euros que el anterior gobierno municipal tenía incluidos en las cuentas municipales del presente ejercicio 2023, a lo que habría que agregar todas las subvenciones desperdigadas en diferentes áreas y concejalías municipales que se dedicaban a asociaciones y entidades vinculadas al separatismo catalán, y que tienen en la promoción de la lengua la excusa para recibir ayudas públicas directas.

Los 24.000 euros que se destinarán a este apartado en 2024 serán para publicidad, propaganda y actividades diversas que tendrán en este caso un carácter testimonial dado que, además, la política lingüística y la promoción del catalán no es competencia directa del Ayuntamiento de Palma.

Otro de los apartados ideológicos que también desaparecen de las cuentas públicas del próximo año es el dedicado a la memoria histórica, aunque en el caso del Consistorio palmesano, tenía un carácter más que nada testimonial.

De los más de 60.000 euros anuales que el anterior gobierno dedicaba a lo que se denominaba memoria de la ciudad, apartado destinado básicamente a enaltecer a las víctimas del bando nacional, se pasa a cero euros. Casillero en blanco en el Excel presupuestario municipal, donde sí que figura, por contra, toda una batería de inversiones en materia de obras públicas que se empezarán a ejecutar el próximo año.

Entre las partidas a destacar están, por ejemplo, los 200.000 euros que se dedicarán al concurso de ideas para la redacción del proyecto de reforma de las galerías de la plaza Mayor de Palma; los 800.000 euros reservados para la reurbanización de la céntrica plaza del Mercat con el rediseño del popular bar kiosco Alaska incluido, al igual que se contemplan otros 150.000 euros para obras en la plaza Comtat del Rosselló.

Palma destina menos al catalán y más a obras

Se destinarán dos millones de euros a expropiaciones y 1,5 millones a hacer realidad el Parc de Son Quint, mientras hay una primera partida de medio millón para la futura reforma del emblemático edificio de Gesa.

Una declaración de intenciones más que nada, porque para ello el gobierno municipal necesita, en primer lugar, llegar a un acuerdo con su propietario (Endesa) y que el inmueble pase a ser de titularidad pública. A partir de ahí, se iniciarán los pasos para su destino a uso sociocultural, entre otras cuestiones, el prometido Museo de Arte Moderno y Contemporáneo, además, de otras iniciativas vinculadas al ámbito cultural.

Los 500.000 euros reservados sólo alcanzarían para la redacción del proyecto, ya que la reforma del edificio tendrá un coste millonario dado que, además, está declarado como Bien Catalogado por lo que el gobierno municipal tendrá que tener el visto bueno de los técnicos del Consell de Mallorca, antes de ponerse manos a la obra.