Receta de Lenguado en salsa de setas

El lenguado es un pescado de carne blanca, muy apreciado en nuestra cocina y la de muchos lugares del mundo. Su conocida forma plana lo hace formar parte del grupo de los peces soleidos, como el rodaballo. Vive a 100 metros de profundidad cuando alcanza la madurez y le gustan las aguas templadas. Su carne, blanca, firme y magra, es protagonista de innumerables recetas, como esta de lenguado en salsa de setas.

Se trata de un pescado que tiene sus dos lados muy bien diferenciados; uno es gris parduzco, jaspeado y con motas oscuras, al tacto resulta áspero. El otro es blanquecino porque vive en el fondo marino y está en permanente contacto con la arena. Es común en el Mediterráneo y en el Atlántico, y los meses de pesca van de febrero a abril, que es también cuando tiene un precio más asequible. Puede llegar a medir 70 cm y a pesar hasta 3 kilos.

Ingredientes:

Cómo preparar lenguado en salsa de setas:

1. Precalentar el horno a 200° C.
2. Lavar los filetes, secar con papel de cocina y salpimentar.
3. Enrollar cada filete cuidadosamente y atar con hilo de cocina. Reservar.
4. Limpiar y lavar las setas (sin ponerlas en remojo). Trocearlas.
5. Lavar el tomillo y el perejil, separar las hojas del tomillo y picar muy finamente el perejil.
6. Pelar la cebolla y los ajos y picarlos muy pequeños.
7. En una sartén, poner dos cucharadas de aceite y saltear las setas 4 minutos.
8. Agregar la cebolla, los ajos, el tomillo y el perejil y remover continuamente. Añadir la harina, dorar un poco y luego agregar el caldo.
9. Cocinar a fuego medio hasta que espese, sin dejar de remover. Rectificar de sal.
10. Una vez espesa, regar una fuente de horno con la salsa, disponer los rollos de lenguado encima y terminar con el resto de la salsa en el pescado.
11. Hornear durante 10 minutos.
12. Sacar del horno, retirar el hilo de los rollitos y servir inmediatamente.

Si te gusta el pescado, este lenguado en salsa de setas te va a encantar, y no solo a ti, a tus niños también, porque es una carne suave de gran sabor que a los más peques suele gustar. Acompaña con arroz blanco o con unas patatas al vapor, que siempre quedan muy buenas. No olvides una ensalada fresca para balancear la dieta.