Bombones caseros con crema de cacahuete, receta casera

Si te gusta la mantequilla de cacahuete, te va a encantar esta receta para hacer bombones caseros de chocolate y cacahuete, una golosina deliciosa y alta en proteínas que además proporciona energía y es muy saludable. El intenso sabor a chocolate y cacahuete va a encantar a todos en casa.

La mantequilla de cacahuete es alta en calorías, pero es muy saciante y contiene grasas saludables, así como antioxidantes y minerales importantes, como hierro y calcio.

Para hacer estos bombones, es conveniente usar un termómetro de cocina, pues manipular el chocolate a la temperatura adecuada es clave en la elaboración de bombones.

Ingredientes:

Preparación:

1. En un bol, mezcla la mantequilla ablandada, la mantequilla de cacahuete y el azúcar glas.
2. Revuelve bien hasta obtener una crema suave, transfiérela a una manga pastelera y reserva.
3. Separa el chocolate en tres partes, reserva una parte y funde el resto, a 50 grados. A continuación, agrega el resto del chocolate y revuelve hasta que se haya disuelto por completo.
4. Coloca el recipiente del chocolate derretido dentro de un bol con hielo, para enfriar el chocolate rápidamente a unos 26 o 28℃. Mientras se enfría, bátelo vigorosamente, para evitar que se congele y se pegue al recipiente.
5. Vuelve a calentar el chocolate a baño María, hasta aproximadamente los 31 a 33℃.
6. Vierte el chocolate en los moldes para bombones, muévelos para que se adhiera a los lados y llévalos al refrigerador durante 10 minutos.
7. Retira los moldes del frío, rellénalos con la crema utilizando la manga pastelera y cierra cada molde vertiendo encima un poco de chocolate caliente.
8. Vuelve a colocar en el refrigerador durante 10 a 15 minutos.
9. Pasado ese tiempo, desmolda y sirve, o envuélvelos en papel de aluminio y conserva en el refrigerador.

Templado del chocolate para bombones

El templado es un procedimiento que hace que se formen cristales en el chocolate, lo cual permite que, al tomar un bombón con las manos, el chocolate no se derrita instantáneamente. De esta forma, se obtiene un chocolate estable, crujiente, como el de los bombones que se compran en las tiendas.

Para el templado, el chocolate se debe calentar a 50℃ y a continuación se debe enfriar hasta que llegue a los 26 o 28℃. Después se vuelve a calentar, hasta que tome una temperatura de 31 a 33℃.

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