Iturgaiz le dice a Urkullu que «sus recetas son impuestos como Sánchez e intervencionismo como Iglesias»
Urkullu ha advertido de que vienen «tres años duros» y ha recordado algunas de las medidas adoptadas como el Plan de choque Covid-19 con 1.550 millones y la estrategia Guztiok Bat en la que están trabajando con 10.000 millones, mientras que Iturgaiz ha asegurado que esas recetas son «más impuestos».
A su juicio, hay un modelo que «funciona» basado en la industria, la innovación y la internacionalización. «Euskadi se ha levantado de cada crisis, vamos a volver a bajar el paro del 10% y vamos a salir adelante nuevamente», ha agregado.
Urkullu ha asegurado que «lo primero» en economía es «generar estabilidad y confianza», y ha afirmado que el Gobierno Vasco no va a hacer recortes y tampoco se van a subir impuestos, porque la política fiscal necesita «certidumbres» y toca revisar los efectos de la última reforma fiscal aprobada hace tres años para «a continuación, adoptar las decisiones».
El Lehendakari ha negado que «en absoluto» se estén aplicando ya recortes y ha pedido hacer memoria de cuándo se «empezaron a aplicar los recortes y cuándo se dejaron de aplicar». «La señora Gorrotxategi ha situado los recortes en 2008 cuando no estábamos en los Gobiernos», ha indicado.
Por su parte, el candidato de PP+Cs a lehendakari, Carlos Iturgaiz, ha afirmado que cuando en España gobierna la izquierda «hunden económicamente el país y el empleo» y le ha dicho al lehendakari que son «sus socios, a los que el PNV ha afincado en la Moncloa».
Iturgaiz ha indicado que, en el caso de Euskadi, ya saben las recetas del Gobierno Vasco que son «más impuestos, como quiere Sánchez, y más intervencionismo, como quiere Iglesias».
El candidato de PP+CS ha apostado por bajar impuestos, por utilizar el Concierto para recuperar el empleo y la economía o prorrogar los ERTEs hasta el primer trimestre de 2021. Por último, ha indicado que los jóvenes para los que promete Urkullu una oportunidad son «los que tienen carné y están afiliados al PNV».
la candidata socialista a Lehendakari, Idoia Mendia, ha precisado que fue miembro del Gobierno Vasco en 2009 y afrontaron una «grave crisis» sin la «ayuda» de poder cambiar la fiscalidad y se hizo «sin recortes y acudiendo al endeudamiento con rigor».
Mendia ha añadido que, cuando Urkullu llegó al Gobierno, el PSE-EE tendió la mano «con generosidad» para cerrar un acuerdo y cambiar la fiscalidad «sin recortes». La candidata socialista ha asegurado que se vive una crisis «inédita» que requiere actuar a corto plazo, de manera urgente, ayudando a las empresas a resistir mediante la inyección de liquidez, con ayudas a pymes y autónomos o con los ERTEs.
También es precisa, a su juicio, una «mirada de medio y largo plazo» porque los ejes de transformación económica los marca la UE y son la digitalización y la transición ecológica. «Y ahí Euskadi está muy bien posicionada para aprovechar esas oportunidades que generarán empleos», ha manifestado Mendia, que ha llamado a invertir en innovación y desarrollo y apostar por el diálogo social, con la sociedad civil, entre las instituciones vascas y entre los partidos para «hacer esos grandes acuerdos de reconstrucción de Euskadi».
Vox, fuera del debate, habla de «oportunidad»
Vox no participó en este debate, al no contar con representación parlamentaria hasta el momento. En un acto llevado a cabo este miércoles, la portavoz adjunta de Vox en el Congreso, Macarena Olona, ha afirmado que este 12 de julio, los vascos «tienen la oportunidad de romper el muro de hormigón que el PNV ha construido desde hace 40 años» e «irrumpir en las instituciones públicas vascas para que la voz del sentido común, por fin, tenga representación».
«Es o Vox o la nada», ha asegurado, antes de señalar que el próximo 12 de julio su partido «puede hacer historia porque lo que nos estamos jugando es España».
Olona ha participado este martes en las campas de Armentia (Vitoria) en un acto electoral junto a la cabeza de lista de Vox por Álava, Amaia Martínez, donde ha criticado que el PP y el PSOE a «pesar de tener mayorías absolutas», no han reformado la ley electoral «permitiendo que partidos secesionistas, enemigos de España, sigan teniendo la sartén por el mango».
Asimismo, ha rechazado que votar a Vox sea «tirar los votos o dar un mayor porcentaje de votos a la izquierda» y ha asegurado que «ni el PP, ni Ciudadanos –la veleta que hoy es más muleta– ni el PSOE o Podemos son alternativa».
La cabeza de lista de Vox por Álava, Amaia Martínez, por su parte, ha denunciado «la imposición del euskera que los alaveses sufren por parte del PNV» y ha denunciado que para el Gobierno Vasco los alaveses son «ciudadanos de segunda».
«Vox debe entrar en el Parlamento Vasco para decirles que se les ha acabado el chollo, que no nos vamos a callar y que lo que tienen que hacer es reducir el número de cargos políticos», ha señalado.