Almeida pide una comisión de delitos de odio por los incidentes violentos en Barcelona
José Luis Martínez-Almeida, alcalde de la capital, se ha preguntado este domingo en sus redes sociales si los graves altercados registrados hace unas horas en Barcelona son motivo suficiente para una nueva convocatoria de la comisión de delitos de odio. «¿Cuándo convoca Pedro Sánchez la comisión de delitos de odio por esto?», ha lanzado el regidor madrileño.
El también portavoz del Partido Popular ha publicado un vídeo de los desórdenes públicos e incidentes vividos este sábado en la Ciudad Condal y se ha preguntado, no sin un punto de ironía, si el presidente del Gobierno va a convocar una sesión de la comisión de delitos de odio como la que presidió a cuenta de la salvaje agresión en el barrio de Malasaña que finalmente fue falsa.
«Espero que la presida», ha señalado Almeida en referencia a este órgano de seguimiento del Plan de acción contra los delitos de odio que el viernes presidió Sánchez tras ser convocada de urgencia en el Ministerio del Interior.
¿Cuándo convoca Pedro Sánchez la comisión de delitos de odio por esto? Espero que la presida. pic.twitter.com/G4PogHoO7t
— José Luis Martínez-Almeida (@AlmeidaPP_) September 12, 2021
Cabe recordar que, como informó OKDIARIO, el sábado en la capital catalana, durante la manifestación independentista de la Diada, los independentistas radicales hicieron de las suyas. Los efectivos de los Mossos d’Esquadra tuvieron que detener a dos personas, una por desórdenes públicos y otra por atentado a la autoridad, en unos incidentes registrados en la Via Laitena, frente al edificio de Jefatura de la Policía Nacional.
Críticas de sindicatos
Por su parte, también este domingo, la Unión Federal de la Policía (UFP) ha denunciado la «pasividad» del Gobierno y del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ante dichos incidentes, lo que creen que es un ataque a las instituciones del Estado. En un comunicado, la UFP considera al Gobierno y al ministro del Interior responsables de esta situación y les acusa de mantener una actitud «políticamente cobarde».
Durante los incidentes, según la Policía, fueron arrojados objetos, pintura, botes de humo y vallas y fue vaciado un extintor contra los Mossos que custodiaban el edificio de la Jefatura en la Via Laitena barcelonesa.
3.000 antisistema
Dentro de los actos de la Diada, uno de los más polémicos fue el que congregó a cerca de 3.000 personas convocados por la Izquierda Independentista, es decir, la unión de la CUP, Arran, Sepc y Alerta Solidària entre otros. Han protestado contra las «renuncias» del Govern, y han llamado a la desobediencia para avanzar hacia la independencia.
La manifestación tradicional de la Izquierda Independentista por el 11 de Septiembre, que este año ha celebrado bajo el lema ‘La lluita es l’únic camí. Ni pactes ni renúncies’ (La lucha es el único camino. Ni pactos ni renuncias), comenzaron en la plaza Urquinaona, avanzó por la ronda Sant Pere hasta Arc de Triomf, recorrió el paseo Lluís Companys y finalizó en la plaza Comercial, donde celebraron un acto.
Durante el transcurso de la manifestación, los manifestantes han lanzado consignas anticapitalistas e independentistas, y han gritado lemas ‘ERC y JxCat la paciencia se ha acabado’, ‘Ni España ni Francia, Països Catalans’, ‘Independencia para cambiarlo todo’ y ‘Se ha acabado la paz social’, entre otras muchas.
Al inicio de la manifestación, la CUP ha repartido folletos contra la ampliación del Aeropuerto de Barcelona, tema que también ha protagonizado pintadas que algunos encapuchados han hecho a lo largo del recorrido, junto a lemas como ‘Defendamos la tierra’ e ‘Independencia o sumisión’.
La marcha se desarrolló sin incidentes destacables hasta que en un lateral del paseo Lluís Companys una decena de encapuchados han quemado una foto del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, saludándose con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y banderas de España, Francia y la UE, y después sobre el fuego han lanzado aviones de papel con los nombres de PSOE, Unidas Podemos, ERC y Junts.
Críticas a Sánchez
En el acto, la miembro del Secretariat Nacional de la CUP Anna Saliente ha defendido que el camino para la independencia pasa por la desobediencia y la movilización popular, no por «competir para ser los alumnos aventajados de Pedro Sánchez ni competir para ser los mejores gestores del autonomismo», en alusión velada a ERC y Junts. Ha afirmado que el autonomismo es insumisión y ha advertido de que la libertad no se ganará en una «mesa de diálogo estéril», sino luchando.