Los proetarras y antifascistas vuelven a acosar a Vox en su mitin de Vitoria
La campaña de Vox en País Vasco está siendo condicionada por el intento de proetarras y antifascistas de reventar sus mítines. Este domingo, la formación de Santiago Abascal ha celebrado un tenso acto en Vitoria entre fuertes medidas de seguridad y gritos de «fascistas» de los manifestantes.
Desde Vox han reivindicado ser «la única alternativa para frenar al nacionalismo excluyente». El acto electoral ha tenido lugar en la céntrica plaza de los Fueros de la capital alavesa con la presencia del secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, la presidenta del partido en Madrid, Rocío Monasterio, y la candidata a lehendakari y cabeza de lista de esta formación por Álava, Amaya Martínez.
Numerosos agentes de la Ertzaintza han impedido el acceso de más de un centenar de manifestantes proetarras y antifascistas concentrados en las distintas calles que desembocan en la plaza donde se ha desarrollado el mitin, quienes proferían gritos en euskera como «Fuera fascistas» e insultos contra los dirigentes de Vox.
En este mitin no se han producido incidentes debido a la protección de la Ertzaintza, al igual que ocurrió este sábado en Bilbao, donde un amplio cordón policial en el parque del Arenal impidió que se registraran altercados.
Sí hubo incidentes en cambio el viernes en San Sebastián, donde dos personas fueron detenidas durante los enfrentamientos entre manifestantes y agentes que protegían el acto en el que participaba el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith.
El discurso de Ortega Smith
El secretario general de Vox ha asegurado que el PNV es un partido de «cuatro gatos» que tiene «manipulada» la democracia en País Vasco y cuyas manos están «manchadas de sangre» por su «connivencia con el terrorismo». Ortega Smith ha calificado al lehendakari, Iñigo Urkullu, de «renegado» por afirmar que «no es español».
Además, ha acusado al PNV de utilizar a los vascos y españoles «como una pelota», a la que siguen golpeando «fuerte» con su «intolerancia, dogmatismo e ineptitud». Frente a la «intolerancia» que caracteriza a la formación ‘jeltzale’, ha asegurado que Vox defiende la «libertad».
«Frente a ese discurso excluyente, queremos hablar para todos», ha afirmado Ortega Smith, para acusar al PNV de querer tener «el monopolio» del poder institucional en País Vasco, y denunciar que la formación ‘jeltzale’ tiene «sus sucias manos manchadas de sangre, por la connivencia con el terrorismo, y de corrupción».
«Sois pocos aunque os creáis una mayoría. Sois cuatro gatos en el Congreso de los Diputados, cuatro gatos a los que, desgraciadamente, os han comprado los partidos que representan de momento a la mayoría de los españoles: el PSOE y el PP», ha afirmado. Ortega Smith ha insistido que el PNV es un partido de «cuatro gatos» que «no representa nada en el conjunto de España», y que tiene «manipulada la democracia» en Euskadi.
El dirigente de Vox también ha criticado el euskera batua, la lengua vasca unificada a partir de las distintas variantes tradicionales del euskera, del que ha afirmado que recurre a palabras «inventadas» y procedentes de «dialectos de distintas aldeas que no se entendían entre ellas».
Ortega Smith ha afirmado que el PNV no es un partido nacionalista, dado que «aquí no hay más que una nación, que es España», y ha acusado a esa formación de introducir en la mente de los niños, desde que van a la «guardería», mensajes de «odio a España» y «mentiras históricas».
En el acto también ha intervenido la cabeza de lista de Vox por Álava, Amaia Martínez, que ha asegurado que los miembros de esta formación son «valientes y patriotas», y no «cobardes y traidores» como, según ha dicho, son los ciudadanos de ideología nacionalista.
Por su parte, Monasterio ha criticado a los «nacionalistas excluyentes» y a los «bilduetarras», frente a los que ha reivindicado «el orgullo de ser español». La dirigente de Vox ha reiterado su exigencia de que el lehendakari, Iñigo Urkullu, «devuelva el acta» de parlamentario en la Cámara vasca «si no se siente español», ya que dicha acta «pertenece a todos los españoles».
Monasterio, que ha afirmado que su partido es la única opción de «voto útil» frente a los «terroristas y filoetarras», ha censurado el gasto social, sobre el que ha afirmado que solo crea ciudadanos «vagos y dependientes».