Laya alardea en un mail de “eficacia” en la crisis de Reino Unido pese a abandonar a los camioneros

La autocrítica no es una palabra que circule demasiado por el Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Y tampoco, desde luego, en el Ministerio de Asuntos Exteriores. Y es que su ministra, Arancha González Laya, ha remitido un mensaje navideño a sus empleados en el que se felicita de la “eficacia” conseguida, entre otras cosas, en las más que polémicas compras de material anti-Covid, unas adquisiciones en las que fueron más los productos que no llegaron o lo hicieron fuera de uso, que los que realmente llegaron a España a tiempo como para proteger a la población. Todo ello sin contar con que los precios llegaron a triplicar los de mercado. Y, para colmo, la ministra de Exteriores lanza el mensaje triunfalista en plena crisis de las pateras, tras el abandono a los camioneros por la nueva cepa del coronavirus y después de confirmar la renuncia a reclamaciones históricas sobre Gibraltar.

“Estimados trabajadores y trabajadoras del Ministerio”, comienza el mensaje. “No ha sido un año fácil. Todos conocemos las razones que nos han llevado a vivir situaciones de enorme complejidad profesional y de dolor en nuestros entornos personales. Por eso, en primer lugar, deseo enviaros mi afecto y mi solidaridad con aquellos que hayáis sufrido la Covid-19 y, en especial, a quienes hayáis perdido a un ser querido durante la pandemia”, asegura el mensaje.

En segundo lugar, González Laya destaca que “en ese escenario tan complejo, este Ministerio, sus trabajadoras y trabajadores, sin importar el cargo o el rango –desde diplomáticos hasta operarios, pasando por personal de limpieza y de seguridad, auxiliares técnicos y administrativos, personal de confianza y secretarias–, habéis estado a la altura de vuestra responsabilidad y de vuestro compromiso. Por eso mi segundo mensaje es de agradecimiento y de felicitación por todo lo conseguido en un año que ha exigido de todos y todas un esfuerzo extra. Podéis estar muy orgullosos y así me siento yo de vuestro trabajo”.

Por todo ello, “en el balance de este año”, que se arroga ya la ministra para el conjunto de su Departamento, «destaca el enorme trabajo de repatriación de miles de nuestros ciudadanos desde el inicio de la pandemia con la colaboración de nuestra red de 220 Embajadas y Consulados y sus 3.500 profesionales”. Olvida la ministra las innumerables quejas iniciales por la tardanza en esa repatriación. Y la llegada confirmada ya de contagiados sin control en esos vuelos.

Camioneros abandonados

“También tuve la suerte de comprobar en persona la extraordinaria labor de unidad de crisis de Emergencia Consular del Ministerio, que sigue operativa todos los días, todas las horas, atendiendo, junto con nuestros Consulados y Embajadas, llamadas diarias para asegurar que todos los españoles en el exterior -en estos últimos días camioneros españoles varados en Inglaterra- reciben la atención y la ayuda que merecen”, añade el mensaje de la ministra de Exteriores. Lo dice mientras resuenan las quejas de esos mismos camioneros por haber sido abandonados en su vuelta de Reino Unido tras ser descubierta la nueva cepa del coronavirus.

La ministra prosigue y señala que “gracias a vuestro trabajo, y a través de una coordinación eficaz con el Ministerio de Sanidad, nuestro Ministerio ha sido clave en algunas de las gestiones más delicadas que ha exigido la pandemia, como las compras y el transporte del material médico que tanto escaseaba al inicio de la Covid-19. Es importante que seáis consciente del significado de vuestra labor: además de haber solucionado situaciones difíciles, de haber aplacado incertidumbres y angustias, habéis contribuido a salvar vidas”. Y lo afirma cuando la polémica por las nefastas compras ha costado al menos 300 millones de euros en material inservible, todo ello sin contar con el material que llegado meses después de lo anunciado.

“Y por si todo ello no fuera suficiente, al mismo tiempo hemos seguido apoyando a los países más necesitados de ayuda y cooperación”, prosigue la ministra, en un mensaje ya en primera persona del plural para felicitarse a ella misma.

Rescate a España

El mensaje continúa felicitándose por el rescate que pagará Europa a España y anotándoselo como un logro de su Ministerio: “Se ha logrado también aprobar un nuevo Presupuesto europeo y un fondo de recuperación post-Covid inédito por su monto y por lo que representa de paso adelante en una mayor mutualización europea. Ambos van a ser vitales para la transformación de España y para el bienestar de nuestros ciudadanos”. El dinero, por cierto, aún no ha llegado a España.

Y llegados a este punto, alardea incluso de un acuerdo de Brexit que ha olvidado por completo las antiguas exigencias españolas de cosoberanía del Peñón de Gibraltar: “Como lo va a ser el acuerdo entre la UE y el Reino Unido que acabamos de concluir sobre la relación post-Brexit y que ojalá se vea también acompañado de un acuerdo entre España y el Reino Unido en lo relativo a Gibraltar”.

Por todo ello, González Laya se muestra feliz: “Las circunstancias exigían el compromiso que habéis mostrado, pero también un constante aprendizaje para trabajar en línea, desde hogares en los que no siempre era fácil concentrarse. El esfuerzo que se ha hecho para trabajar a distancia sólo es comparable al hecho por los técnicos informáticos para que fuera posible. La coordinación, la cooperación y el compañerismo han sido más que reseñables, una actitud por la que me siento especialmente agradecida. Podemos decir con orgullo que practicamos en casa lo que predicamos para las relaciones internacionales”.

Por todo ello, la ministra quiere repetir el próximo año la actitud de 2020: “Ese legado de 2020 es la mejor garantía para afrontar un 2021 lleno de retos. Algunos están relacionados con la pandemia, como el refuerzo del papel internacional de España en la vacunación global frente a la Covid-19”. La realidad es que España no ha gestionado nada en la vacuna: la compra ha sido realizada por la UE.

“Otros nos exigen avanzar en compromisos ineludibles, como al apoyo humanitario, la lucha contra el cambio climático, o como el necesario impulso a la digitalización de los servicios consulares. Nos espera, por tanto, otro año intenso, en el que además aprobaremos una nueva Estrategia de Acción Exterior necesaria para responder a una realidad que cambia a gran velocidad”, concluye la ministra.