Las petroleras y gasistas llegan a la cumbre del clima con más brillo en Bolsa que las renovables
Este domingo arranca la cumbre del clima COP27 en Sharm El Sheik, Egipto, y durará hasta el 18 de noviembre. Las grandes petroleras llegan sacando pecho por sus resultados y desempeño bursátil a la conferencia anual de Naciones Unidas sobre cambio climático a la que acuden representantes de países, empresas y organizaciones sociales con el objetivo de abordar medidas para hacer frente a la crisis climática y analizar la aplicación de las ya acordadas. Las cotizadas de energía renovable no pueden decir lo mismo.
El Dow Jones Oil & Gas Index, el índice que aglutina a las grandes compañías de los sectores gasístico y petrolero, sube más de un 60% en lo que va de año. Estas cotizadas se están beneficiando del fuerte incremento en el precio ambas materias primas a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania. El barril de petróleo de tipo Brent, el de mayor relevancia internacional, asciende más de un 20% en lo que va de año, mejora del 17% en el último trimestre, hasta rozar los 100 dólares en el mercado de futuros al cierre de esta edición.
El barril de tipo West Texas, referencia en Estados Unidos, avanza más del 25% desde enero, hasta sobrepasar los 90 dólares. El gas de referencia en Estados Unidos se dispara más de un 70% en el mismo periodo y situación semejante para el mercado europeo alcanzando el máximo histórico a finales de agosto en 346 euros. La Organización de Países Exportadores de Petróleo liderada de facto por Arabia Saudí más los productores independientes encabezados por Rusia, lo que se conoce como la OPEP+, confían en que la demanda continúe al alza pese a descontarse una recesión global entre finales de este año y principios del que viene.
La Agencia Internacional de la Energía, creada por la OCDE, ha advertido de problemas desabastecimiento en 2023 si Rusia sigue cortando el suministro a Europa y deriva el producto a China si el gigante asiático incrementa su demanda por un mayor crecimiento económico. La situación provoca que las compañías de ambos sectores estén presentando los mejores resultados de su historia. Tal es el caso de Aramco, Gazprom, Chevron o Exxon Mobil, con subida de un 75% en Bolsa en lo que va de año para esta última petrolera.
Lo ‘verde’ pierde más de un 10%
La COP27 busca primar a las compañías de energía renovable, pero las intenciones, que vienen desde los Acuerdos de París, no se están reflejando en Bolsa como sí lo hicieron, por ejemplo, en 2020 a raíz del coronavirus. La inversión en energía renovable se ve eclipsada por el crudo dejando a un lado las políticas estatales o globales para la transición energética y los objetivos 2050.
El S&P Global Clean Energy Index, que compila las cotizaciones de las compañías renovables de mayor tamaño, pierde más de un 10% este año. Aunque hay casos de éxito como la subida de casi el 80% en Bolsa de la estadounidense First Solar, también hay caídas a doble dígito de otras referencias como Vestas o NextEra Energy.
WisdomTree, firma de inversión de EFT (inversión pasiva e indexada que replica índices, sectores o acciones) rompe una lanza a favor de la inversión verde este año. Reconoce que las condiciones del mercado son «adversas para todos los valores de crecimiento», pero los flujos de activos temáticos en toda Europa crecen hasta 11.700 millones este año, 1.100 millones en el último trimestre, según sus datos.
«Los activos de cambio climático y sostenibilidad son los que más interesan y los que más flujos reciben. La temática de producción de energía sostenible es la que más entradas registra en lo que va de año, 3.600 millones», remachan.