La naranja de Valencia y Murcia está en peligro: la plaga sudafricana que destroza los cítricos
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La situación del campo levantino es complicada por los problemas en el etiquetado de sus productos estrella. A eso hay que sumarle los destrozos que puede hacer la propia naturaleza. En este caso, Valencia y Murcia sufren una plaga que afecta directamente a la naranja.
Se trata del cotonet de Sudáfrica, un insecto invasor cuya expansión continúa desbordando las estrategias actuales. Según datos y análisis del estudio de la empresa de agrotecnología RawData, su impacto económico y productivo no deja de aumentar campaña tras campaña.
El cotonet: la plaga sudafricana que amenaza a las naranjas de Valencia y Murcia
El cotonet (Planococcus citri) es una cochinilla algodonosa originaria de Sudáfrica que se detectó por primera vez en España en 2009, en cultivos de naranjo dulce y clementino de Benifairó de los Valles (Valencia).
Desde entonces, su expansión ha afectado especialmente a las zonas citrícolas de Valencia y Murcia, convirtiéndose en una de las plagas más problemáticas del sector.
Una de las claves de su peligrosidad es la ausencia de un sistema de control plenamente eficaz y la dificultad para establecer una metodología clara y uniforme. El estudio de RawData destaca que esta falta de control estructurado ha favorecido su expansión en amplias zonas citrícolas.
La identificación del cotonet es fundamental para frenar su avance. Las hembras tienen forma ovalada, miden entre 2,5 y 5 milímetros de longitud y están cubiertas por una secreción cérea blanca que les da un aspecto harinoso.
Tienen 18 pares de filamentos céreos en el borde del cuerpo; los situados en las placas anales son ligeramente más largos, un detalle diferenciador respecto a otras especies similares.
Por el contrario, los machos tienen alas de pequeño tamaño (un milímetro de largo) y un color variable entre el naranja claro y el marrón rojizo. La parte del ala es transparente.
Justamente, estamos a las puertas de la época donde el cotonet es más peligroso, ya que es en el primer trimestre donde está especialmente activo. Además, alcanza su pico máximo en junio.
Los daños que provoca el cotonet en los naranjos valencianos
El impacto del cotonet en los cítricos es severo y directo. Esta plaga deforma el fruto hasta hacerlo inviable para su comercialización. En el caso de las mandarinas, provoca deformaciones extremas que las hacen inservibles para el mercado.
En las naranjas, inhibe su crecimiento y reduce su tamaño hasta dejar frutos similares a una canica. Aunque afecta a todas las variedades, las más susceptibles son las navel.
Los daños pueden ser de dos tipos. Los directos son los derivados de las manchas cloróticas que aparecen cuando el insecto se alimenta del fruto, especialmente en zonas donde hay contacto entre ellos.
Los indirectos están asociados a la secreción de melaza, sobre la que se desarrolla la negrilla, un hongo que cubre hojas, ramas y frutos, deteriora su aspecto y reduce la fotosíntesis.
Además, el cotonet favorece la aparición de otras plagas, como el barrenador de los cítricos Ectomyelois ceratoniae. Este efecto en cadena incrementa exponencialmente las pérdidas productivas en zonas altamente infestadas.
La dificultad para combatirlo (debido a los plaguicidas efectivos que permanecen prohibidos en España) es un lastre más para la agricultura de nuestro país. A ello hay que sumarle otros inconvenientes como la competencia extranjera en el sector agrario.