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El mayor fabricante de queso Idiazábal lleva a Generali a juicio por impago de más de 40 millones de euros

Este lunes arranca en el juzgado de primera instancia 1 de Vitoria, un juicio de cinco días donde la aseguradora italiana Generali se juega ser condenada a pagar una indemnización de más de 40 millones de euros que se ha negado a abonar.

El mayor fabricante de queso Idiazábal lleva a Generali a juicio por impago de más de 40 millones de euros
Santiago Villa, CEO de Generali España, declarará ante el juez de Vitoria

Un juicio económico entre dos empresas con más de 40 millones de euros en el aire se celebra a partir de este lunes en el juzgado de primera instancia de Vitoria (Álava). A un lado del ‘ring’ legal se encuentra la empresa láctea especialista en fabricación de quesos Aldanondo, que dice ser la mayor de todas las compañías que fabrican el conocido queso vasco de la Denominación de Origen Idiazábal, con leche cruda de oveja de las razas ‘latxa’ y ‘carranzana’.

Al otro lado se sentará la aseguradora italiana Generali, cuyo consejero delegado en España Santiago Villa tendrá que declarar para explicar los motivos por los que su compañía de seguros, con la que la compañía quesera había suscrito una póliza, se negó a indemnizar a Aldanondo después de que en agosto de 2018, un incendio redujera a cenizas su planta quesera de Salvatierra-Agurain, Álava.

En esta imagen facilitada por Aldanondo puede verse cómo fue el incendio de la planta.

Responsables de Aldanondo aseguran a este periódico que «en octubre de 2018 pedimos a Generali el anticipo a cuenta, según la ley del contrato de seguros, que la aseguradora no sólo no adelantó, sino que a día de hoy sigue sin hacer frente al pago de un solo euro de la indemnización».

Denuncian que cuando retiraron todos los elementos dañados, tuvieron que paralizar el inicio de la reconstrucción de la planta debido a la negativa de Generali para pagar la indemnización correspondiente, «a pesar de que los juzgados han dado siempre la razón a Aldanondo».

Incendio fortuito

La posición de la aseguradora Generali era que el incendio se había provocado, algo que no pudo acreditar la Ertzainza. El juzgado de instrucción, tras analizar las pruebas que había, archivó el caso al no considerar que hubiera indicios de que el incendio fuera provocado.

Ante ese archivo, Generali interpuso a principios de 2019 un recurso de reforma. El juzgado de instrucción desestimó este recurso y mantuvo el auto de sobreseimiento.

A continuación la aseguradora, para dilatar más el proceso, presentó recurso de apelación ante la audiencia provincial de Álava, que cinco meses después acordó el sobreseimiento y el archivo de las actuaciones penales. De este modo la justicia ha rechazado, por dos veces, que hubiera ninguna provocación del incendio que justificara que la aseguradora no hiciera frente a la compensación, según denuncia Aldanondo.

El grupo agroalimentario reclama que todo este tiempo ha estado sin poder ponerse en marcha por no cobrar el seguro como le correspondía y ahora quiere una indemnización mayor de Generali.

Ofrecen 15 millones

Mientras tanto, Aldanondo exigió la indemnización a Generali por vía civil. A finales de junio, Generali trató de poner fin al litigio con Aldanondo ofreciéndoles pagar 15 millones de euros para cerrar el caso, según aseguran los empresarios, que rechazaron, ya que consideran que los perjuicios económicos superan los 40 millones de euros, si se tiene en cuenta el propio coste de la reconstrucción, el ERE para la plantilla y también los intereses que han ido corriendo desde que la aseguradora italiana decidió no pagar.

Según aseguran los responsables de la quesera alavesa, que tiene marcas como El Pastor Vasco, Lana, La Quesería Vasca, Zarra y Flor de Araia, Generali intentó asfixiar económicamente a su empresa para que ante la imposibilidad de cobrar del seguro, tuviera que ir a concurso de acreedores. Para ello, su estrategia fue no abonar lo correspondido y recurrir las distintas decisiones de los jueces en su contra. Con ello se buscaba llevar al límite a Aldanondo. Sin embargo, los socios mayoritarios son la cooperativa navarra Saiona que en los últimos años ha apostado por macro granjas, y pudo asistir financieramente a Aldanondo para evitar su caída.

La quesera Aldanondo asegura que Generali quiso asfixiarles económicamente, sin contar con que pudo aguantar por el aporte de sus socios mayoritarios

Tal y como indican los ganaderos navarros a este periódico, «ante el sobreseimiento de todos recursos de la aseguradora por parte de la Audiencia Provincial de Álava, la empresa no ha encontrado otra vía que acudir al Contencioso, si bien la vía judicial ha ocasionado nuevas dilaciones en el tiempo para la reconstrucción de la planta, y con ella de la vuelta al trabajo de los empleados afectados, con las pérdidas tanto de mercado, imagen y generación de recursos que se está acumulando.
Por todo ello, Generali ha provocado una situación insostenible para nosotros, frustrando la vuelta a la actividad que Aldanondo intentó se realizara en tiempo récord».

La mala praxis de Generali, asegura Saiona, les ha obligado a tener que vender una fábrica en Soria para poder equilibrar sus cuentas.

Generali no responde

Este periódico se ha puesto en contacto con el equipo de comunicación de Generali para tratar de recabar su punto de vista de cara al inicio del juicio en el juzgado de primera instancia de Vitoria. Sin embargo, desde la aseguradora italiana no ha habido respuesta.

Generali es una multinacional del seguro que capitaliza 22.700 millones de euros en la bolsa de Milán, siendo la sexta empresa de mayor valor bursátil del país.

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