El BCE salva a Sánchez: mantiene la compra de deuda española mientras vende 25.000 millones del resto

El salvavidas del Banco Central Europeo (BCE) al Gobierno de Pedro Sánchez se ha intensificado en julio. La entidad que preside Christine Lagarde ha mantenido prácticamente estable la cantidad que atesora en su poder de letras y bonos de deuda española a cierre del mes pasado mientras que ha reducido en 25.000 millones su exposición a la del resto de países de la zona euro, según los datos publicados este lunes por el BCE.

De acuerdo con los datos del organismo, la magnitud de la ayuda que ha prestado y sigue prestando el BCE al Tesoro español es de gran calado. Desde marzo, cuando la entidad anunció el fin de su programa de compras de deuda de los países -sólo invertiría la deuda que fuera venciendo hasta este julio-, el BCE ha reducido ya su exposición a la deuda europea en casi 100.000 millones de euros, mientras que la de España sigue siendo superior a cierre de julio que la que había en marzo.

El BCE tenía en marzo algo más de 620.000 millones de productos de deuda española, mientras que a cierre de julio supera todavía los 621.000 millones. en julio apenas se ha deshecho de 700 millones. El organismo ha decidido acabar con las compras netas de deuda desde julio, y ya desde marzo dejó de comprar estos productos salvo los fondos que amortizaba y volvía a reinvertir en deuda de países del sur, principalmente, como España o Italia.

La diferencia con el resto de países de la zona euro es abismal. Desde marzo ha pasado de tener 4,93 a 4,84 billones, casi 100.000 millones de diferencia. El BCE ha tomado esta decisión ante la necesidad de reducir su balance y por el fin de la pandemia y de los problemas de liquidez de algunas economías, como la española, que necesitó del BCE para no pagar cifras astronómicas a los inversores para financiarse.

La previsión es que en el conjunto del año la entidad redujera su exposición a la deuda en 200.000 millones, de los que 20.000 millones corresponden a España. La mayor parte del programa queda pendiente entonces para los últimos meses del año.

Una decisión que se produce justo al mismo tiempo que una subida de calado de los tipos de interés, que ya están en el 4% y está prevista una nueva subida en la reunión de septiembre. La inflación sigue por encima del 2% en Europa por lo que las rebajas de los tipos están lejos todavía.

Primas de riesgo

De momento, la política puesta en marcha por el BCE ha permitido que las primas de riesgo de los países de la zona euro no hayan sido un problema. La de España se mantiene en 101 puntos, mientras la de Grecia se ha situado en 123 puntos y la italiana, en 168 puntos. Esa fue precisamente la idea de Lagarde cuando anunció el fin en marzo de la compras de deuda y la limitación de su actuación a reinvertir los fondos que vencían.

Para España es un problema el incremento de los tipos de interés ya que en julio ya ha pagado las nuevas subastas de deuda a un tipo de interés del 3,6%. En el futuro será más si siguen las subidas de tipos y falta por ver la incidencia que tendrá la salida total del BCE.