Simeone desenmascara a Guardiola
Guardiola ganó la eliminatoria a Simeone, pero para ello se vio obligado a renunciar a su estilo y a jugar a aquello que tanto critica, el fútbol prehistórico. El Manchester City sufrió de lo lindo ante un Atlético arrollador en la segunda mitad y lanzado al ataque, tanto es así que los ingleses terminaron recurriendo a tácticas nada habituales en el estilo de Pep: pérdidas de tiempo, poco fútbol y defendiendo con los once en el área.
El Atlético salió en tromba desde el principio pero el City logró controlar el partido tras los primeros 15 minutos, ayudado en parte por las pérdidas de tiempo y frenando el choque en cada falta. A partir de ahí las aguas volvieron a su cauce, los ingleses tenían la pelota y los locales defendían con una presión alta y buscando salir rápido al contraataque, al más puro estilo Simeone. Fue en la segunda parte cuando cambiaron las tornas.
A la vuelta de vestuarios el partido dio un giro radical. El Atlético, empujado por el Metropolitano, dejó de un lado su estilo defensivo y salió al ataque. La acción de Griezmann en el 56′ levantó a la grada de sus asientos y por momentos el Metropolitano recordó al Calderón. Los de Simeone necesitaban un gol para forzar la prórroga y salieron lanzados en busca del mismo, mientras los ingleses jugaban al antifútbol y se dedicaban a perder tiempo. «Nada que decir. Había saques de banda y no sabíamos cómo jugar. Es lo que hemos hecho», explicaba el técnico citizen justificando las pérdidas de tiempo.
Esta versión arrolladora del Atleti obligó al City a renunciar al balón. «Nos han metido atrás. Nos hemos olvidado de jugar. Mérito suyo. Hoy estamos celebrándolo, pero por la segunda parte podíamos estar eliminados. El Atleti ha hecho un gran segundo tiempo», reconocía Guardiola en sala de prensa tras el partido que se defendía así del hecho de haber tenido que renunciar a su estilo y pasar la eliminatoria gracias al buen hacer defensivo: «No tuvimos otra. El Atlético de Madrid ha jugado brillantísimo. No me ha gustado defender así pero no nos ha quedado otra».