Magic Alonso deslumbra en Daytona: de noveno a primero
Fernando Alonso salió como un tiro en su primer relevo en las 24 horas de Daytona. Adelantó a cuatro pilotos y metió a su Cadillac en el grupo de favoritos.
Fernando Alonso no defraudó en su irrupción en las 24 horas de Daytona. Al piloto asturiano le dejaron el monoplaza número 10 en la novena posición de carrera tras un arranque bastante flojo de su compañero Jordan Taylor y realizó un primer relevo brutal que le llevó a la cabeza de carrera en apenas una hora y media. Alonso dejó a todos con la boca abierta con su manejo de la situación adelantando uno detrás de otro a sus rivales en pista. Magic en estado puro.
El bicampeón de Fórmula 1 y campeón de las 24 horas de Le Mans salió inspirado tras un safety-car a 22 horas y 10 minutos del final y en la reanudación adelantó a Fittipaldi en la recta. No contento con ello, Alonso veía cómo la cabeza se marchaba y él era taponado en el grupeto por Kaiser y Miller.
Los favoritos se escaparon 10 segundos, pero Alonso fue capaz de quitarse de en medio a los dos pilotos mencionados y empezó a marcar tiempazos hasta el punto de colocarse al mismo nivel que los favoritos alcanzando la quinta posición de carrera.
Otro safety-car igualó las fuerzas y Alonso se relamió para la exhibición que iba a dar para ponerse en primera posición en apenas media hora frenética. El español destrozó a un rival detrás de otro. Primero fue su compañero en Cadillac Curan la víctima, luego hizo lo propio con el Acura de Cameron y posteriormente llegaría quizá el pique de la carrera.
Castroneves, campeón de la Indy 500 y una leyenda del automovilismo norteamericano, no iba a vender tan barata su piel y puso al límite al español, quien aprovechó su pericia en las trazadas para finalmente quitarse de en medio al brasileño. El líder de la carrera en ese momento, Rene Rast, fue un happy meal para un Fernando que se llegó a marchar por más de 15 segundos de sus rivales batiendo todos los récords con la pista limpia. En Daytona nunca habían visto un piloto tan superlativo.