Real Madrid – CSKA Moscú: Primer paso a la Undécima
El Real Madrid se cruzará con el CSKA de Moscú en la reedición de la semifinal de la pasada temporada en la Euroliga y que terminó con triunfo blanco antes de sellar la Décima derrotando al Fenerbahce. Los dos equipos, unos clásicos en estas latitudes de la competición, apenas han cambiado desde ese mencionado enfrentamiento con los blancos manteniendo a 11 jugadores y los rusos a nueve.
Pese a este dato, la baja de los blancos es ostensiblemente sensible al tratarse del último MVP de la Final Four, Luka Doncic, quien actualmente es la estrella de los Dallas Mavericks. Pablo Laso, sin embargo, tiene motivos para el optimismo con un equipo que se mostró más que solvente en los cuartos de final apeando a Panathinaikos y sin contar con Sergio Llull por lesión.
Con el menorquín de regreso y sin ningún inconveniente en cuanto a lesiones, los blancos se presentan como favoritos ante un CSKA que se la juega a todo o nada. Si el equipo de Itudis vuelve a morder el polvo, existe una gran posibilidad de que se descomponga como un azucarillo empezando por las salidas de Sergio Rodríguez y Nando de Colo, dos jugadores muy interesados en regresar a España.
La clave está fuera
En el perímetro se encontrará la clave del duelo entre blancos y rusos. Campazzo y Llull han sido dos jugadores tremendamente claves en la temporada blanca y lo mismo se puede decir de Rodríguez y De Colo. Respecto al año anterior, Laso cuenta con la recuperación de Anthony Randolph como pilar fundamental y con Tavares en su versión más letal.
Jugadores como Gustavo Ayón, Taylor o Causeur, todos ellos terminan contrato, querrán dejar un buen sabor de boca con los focos mirando a los blancos. Habrá que estar atento a un Rudy Fernández, este sí tiene contrato, que ha firmado su mejor temporada en el último lustro habiendo olvidado sus problemas de lesiones y siendo fundamental en algunos partidos.
El balear, uno de los mejores defensores de Europa, tendrá la no sencilla misión de desconectar a anotadores compulsivos como Clyburn o Higgins en un duelo que se prevé a muchos puntos y donde nadie puede dar por seguro el triunfo al tratarse de dos equipos con tendencia a las remontadas imposibles.
Especialmente importante será el duelo para un Sergio Rodríguez que aspira a volver a vestir la camiseta blanca tras su erasmus entre la NBA y Moscú. Tras varios años ganando millones y prestigio todo hace indicar que puede ser el último coletazo del Chacho con el CSKA. En su mano estarán gran parte de las opciones de su equipo y de reivindicarse.