La «operación renove» del Atlético tendrá una segunda parte
El próximo verano el club acometerá otra revolución en altas y bajas
Se prepara el adiós de jugadores como Witsel, Azpilicueta, Reinildo, Lemar y puede que incluso Koke
Van a llegar nuevos futbolistas en todas las líneas, con Álex Baena como gran apuesta
La «operación renove» emprendida por el Atlético de Madrid esta temporada tendrá una segunda parte en el verano de 2025 y será todavía más radical. Se prepara el adiós de jugadores como Witsel, Azpilicueta, Reinildo, Lemar y puede que incluso Koke. Llegarán jugadores en todas las líneas, con el almeriense Álex Baena como gran apuesta, tal y como adelantó ayer OKDIARIO.
Los fichajes de Le Normand, Gallagher, Sorloth y Julián Álvarez, combinados con las salidas de futbolistas como Saúl, Savic, Joao, Hermoso o Morata han sido sólo el inicio de un plan diseñado por el club que ha tenido su brazo ejecutor en Carlos Bucero, director general de fútbol del Atlético y nuevo hombre fuerte del club en perjuicio del italiano Andrea Berta, que acaba su contrato el 30 de junio y que posiblemente también abandone la entidad al término de este curso.
Bucero, de acuerdo con Simeone y Gil Marín, diseñó un plan de renovación integral que no ha podido completarse en un solo verano porque implicaba pagar unas indemnizaciones que hubieran convertido en inviable la política de refuerzos emprendida, además de condicionar seriamente el límite salarial. Por eso se han aplazado situaciones sangrantes y por eso se tomó la decisión de renovar por un año a dos jugadores ya muy veteranos como Azpilicueta y Witsel, entiendo que ésta sería una temporada de transición.
El verdadero rostro de este este rediseño se podrá empezar a vislumbrar a partir de agosto de 2025 y de cara al curso 25-26. La idea es contar con una plantilla mucho más competitiva y además mucho más joven que la actual, y por eso ésta será la última temporada de Witsel, Azpilicueta, Reinildo y ojo a Koke, que también acaba contrato, y que no se descarta que ponga también final a su etapa como rojiblanco porque es una evidencia que físicamente no está ya a su nivel habitual, aunque en su caso la última palabra será de Simeone.
El proyecto está todavía por definir porque dependerá de lo que suceda esta temporada y del rendimiento de algunos de los nuevos, en especial de Sorloth, que está muy por debajo de lo esperado y que, de seguir así, no se descarta incluso que se intente sacarlo en enero. Es un caso puntual, pero no el único. También está por ver qué quiere hacer Griezmann el próximo año. El francés tiene contrato en vigor, pero no es ningún secreto que le tienta el reto de acabar su carrera en el fútbol norteamericano junto a su amigo Oliver Giraud.
En cualquier caso Bucero y Simeone, que van mano a mano, están ya en la ejecución de la segunda parte de su plan, que tal y como sucedió el pasado verano va a implicar muchas novedades en una plantilla que no está todavía al gusto del Cholo, y eso se le nota en sus continuos devaneos en alineaciones y sistemas de juego.