Desarticulada en Alicante una red internacional de tráfico de droga con 8 detenidos

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Ignacio Martínez

La Guardia Civil ha desarticulado en Alicante una red que se dedicaba a a producir e importar marihuana a Reino Unido y Holanda. La intervención se ha llevado a cabo en el marco de la denominada ‘Operación Prunera’. En el transcurso de la citada operación han sido detenidas 8 personas, de nacionalidades 5 nacionalidades: española, holandesa, inglesa, cubana y rumana. De esos detenidos, 2 han ingresado en prisión por los presuntos delitos de tráfico de drogas, cultivo y elaboración de sustancias estupefacientes, defraudación de fluido eléctrico y organización criminal. Todo ello, según ha informado la Guardia Civil.

La intervención del Instituto Armado se encuadra en el plan de respuesta policial al cultivo y tráfico ilegal de marihuana. Los agentes han intervenido 37 kilogramos de cogollos de marihuana, maquinaria de laboratorio dispuesta para la manipulación, envasado, análisis de pureza y etiquetado de la droga para su posterior envío al Reino Unido y Holanda. También, fueron intervenidos 5 vehículos, 15.000 euros en efectivo, una pistola simulada y una escopeta de aire comprimido, siempre según la Guardia Civil.

En el vídeo que ilustra esta información puede verse cómo los agentes entran en una vivienda tras echar abajo la puerta. Una vez dentro, el registro alcanza unas bombonas de butano manipuladas con un corte en la parte superior de la los agentes que extraen una bolsa repleta del material buscado.

Las investigaciones comenzaron cuando la Guardia Civil de Alicante tuvo conocimiento del fuerte olor que partía, supuestamente, de una vivienda ubicada en una urbanización de la localidad de San Vicente del Raspeig, a apenas unos pocos kilómetros de la ciudad de Alicante. Los agentes, entonces, iniciaron una intensa vigilancia, tras la que, según la Guardia Civil, se confirmó la presunta relación entre sus residentes y otras personas, supuestamente relacionadas con el tráfico de drogas.

La Guardia Civil desmanteló, en un primer registro, una plantación interior de marihuana. La infraestructura de esos cultivos se mantenía con un enganche al tendido eléctrico de una longitud de 6 metros, que había sido, a su vez, excavado, a 2 metros de profundidad. También, se llevó cabo otro registro en una vivienda de la localidad alicantina de Orcheta, en la comarca de la Marina Baja, cerca de Benidorm. Allí, había dos zulos con laboratorios: una infraestructura preparada para acoger un cultivo de más de 1.000 plantas de marihuana.

La organización también tenía un gran almacén logístico en otra localidad alicantina y también en la Marina Baja: en Polop de la Marina, un centro ecuestre sin actividad de más de 20.000 metros cuadrados y acondicionado para llevar a cabo el cultivo de marihuana. La Guardia Civil constató, siempre según su relato, como en otra parcela se pretendía ocultar un macro cultivo de cannabis de más de 1.000 metros cuadrados.

Los agentes se incautaron de las anteriormente citadas bombonas de butano preparadas para esconder los alijos, así como vehículos supuestamente manipulados para la presunta ocultación de droga. El Juzgado de Instrucción Número 1 de San Vicente del Raspeig ha decretado el ingreso en prisión provisional de dos de los detenidos. A los demás, se les ha impuesto la prohibición de salir del territorio nacional y la retirada del pasaporte. Según la Guardia Civil este entramado se encontraba supuestamente activo desde 2019.

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