6 disfraces caseros de Halloween para niños

Acabas de recibir una nota de la guardería o colegio de tu hijo, donde se te indica que van a celebrar la fiesta de Halloween y que, por tanto, todos los alumnos deben ir disfrazados para la ocasión.

Esa noticia te pilla un poco desprevenida y no te ha resultado especialmente agradable, ya que tu economía familiar no te permite ahora gastar dinero en comprarle un traje. En ese caso, no te preocupes. ¿Por qué? Porque no necesitas invertir ninguna cantidad económica, puedes crear en casa el vestuario que llevará. Sí, sólo se requiere un poco de imaginación y maña.

En concreto, los disfraces caseros más sencillos para niños de cara a la festividad de Halloween son estos:

1-Fantasma

Sin lugar a dudas, el disfraz más fácil de preparar y que menos te costará hacer es el de fantasma. Y es que sólo necesitas una sábana vieja, a la que le tienes que hacer unos agujeros en la zona de los ojos, otros pequeños en la nariz y un tercero en la boca.

Luego esos agujeros los pintarás alrededor de color negro y ¡voilá! un traje terrorífico para esta fiesta, sin invertir dinero ninguno y sin gastar demasiado tiempo.

2-Zombi

De la misma manera, otra de las alternativas más interesantes por las que puedes optar a la hora de encontrar el disfraz de Halloween perfecto para tu hijo es esta. Consiste en vestirle de muerto viviente, como si acabara de salir de la serie “Walking Dead”.

¿Qué necesitas? Una camiseta y un pantalón que sean viejos, para que así puedas romperlos y hacerles jirones en zonas concretas. Luego, tendrás también que optar por un calzado cómodo, tipo zapatillas, que estés a punto de tirarle a la basura.

El disfraz ya lo tendrás, sólo te quedará pintarle la cara de blanco, ponerle muchas ojeras e incluso maquillarle zonas de rojo como si de sangre se tratase.

3-Momia

En esta lista de disfraces caseros y, sobre todo, muy económicos no podía faltar este otro, que es igualmente muy útil y apropiado. Para elaborarlo sólo necesitas una sábana vieja que romperás en una tira larga o en varias.

Una vez la tengas, sólo tendrás que vestir a tu hijo con camiseta y pantalón negro para, acto seguido, enrollarle alrededor del cuerpo las tiras. Y nada más, así acudirá a su guardería o centro escolar como la momia más terrorífica.

4-Vampiro

Uno de los disfraces clásicos de cualquier fiesta de Halloween es este, ya que representa a uno de los personajes más terroríficos y emblemáticos de nuestro acervo cultural. ¿Qué necesitas para vestir así a tu hijo? Lo siguiente:

• Un pantalón negro.

• Una camiseta blanca.

• Calzado también de color negro.

• Una capa negra.

• Barra de maquillaje para pintarle la cara de blanco.

• Lápiz de labios o barra de color rojo, para crearle en la comisura de la boca un reguero de sangre.

A todo eso puedes añadir, si así lo deseas unos colmillos de vampiro, que puedes encontrar en cualquier tienda donde se vendan disfraces e incluso en bazares.

5-Chucky

Si te gustan las películas de terror o si tienes cierta “culturilla” cinéfila, seguro que conoces quién es Chucky. Se trata de un muñeco pelirrojo que, por distintas circunstancias, cobra vida y se dedica a ir asesinando a todas las personas que se le cruzan en el camino.

Una saga es la que protagoniza ese singular y siniestro muñeco, del que puedes disfrazar a tu hijo este Halloween. Para que vaya ataviado como ese, sólo necesitas vestirlo con una camiseta de manga larga y de rayas, un mono vaquero y unas zapatillas.

Ese será el atuendo necesario y para completar su caracterización, sólo requerirá que le pintes la cara de color blanco y que, con un simple lápiz de ojos de color negro, le crees varias cicatrices en el rostro.

6-Espantapájaros

El sexto traje que puedes preparar en casa para que tu niño disfrute de esta fiesta que nos ocupa es el de espantapájaros. Para elaborarlo se requerirá que cuentes con estos elementos:

• Un pantalón vaquero.

• Una camiseta de cuadros.

• Unos zapatos o zapatillas.

• Una cartulina de color amarillo. Esta la deberás cortar en rectángulos y a cada pieza hacerle “flecos”. Y es que así podrás colocarle los mismos en los puños, en los tobillos e incluso en el pelo para que se asemeje a la paja que se utiliza para rellenar a esos muñecos que se colocan en los cultivos con el objetivo de asustar a los pájaros.

Estos son los seis disfraces que consideramos que te pueden ser más fáciles de preparar en casa y que evitarán que tengas que gastarte un dinero en la fiesta de Halloween. No obstante, a los mismos también puedes añadir otros clásicos pero menos terroríficos como el de leñador, el de pirata, el de bailarina o el de payaso.