La alcaldesa comunista de Aguilar votó hace 40 años que la cruz demolida recordaba a todas las víctimas
En lugar de la lápida franquista de mármol se colocó otra placa como homenaje a "todos los que murieron en la Guerra Civil"
El PSOE honró en 1987 a las víctimas de Franco en la Cruz de Aguilar derribada ahora con su Ley de Memoria
La propia alcaldesa de Aguilar de la Frontera (Córdoba), Carmen Flores Jiménez, de Izquierda Unida, que ha derribado la Cruz del Llanito de las Descalzas votó hace 40 años a favor de su resignificación en recuerdo de todas las víctimas de la Guerra Civil y no sólo de los caídos del bando nacional, motivo inicial de su construcción en 1938. Aquella votación del Ayuntamiento celebrada ya en Democracia, a primeros de los 80 y a cuyas actas ha tenido acceso OKDIARIO, hizo que en lugar de la lápida franquista de mármol se colocara otra placa más reducida como homenaje a todas las víctimas de la barbarie, sin distinción de bandos.
Sin embargo, ahora, y después de que esa placa fuera también retirada hace años, la alcaldesa comunista ha ordenado la demolición y destrucción de la Cruz en aplicación de la Ley de Memoria Histórica engendrada por el PSOE. Todo en medio de un fuerte rechazo vecinal. La regidora Carmen Flores, que ya era concejal del Partido Comunista (PCE) a finales del año 1979 tras las primeras elecciones municipales democráticas, ha actuado 40 años después en contra de su propio criterio.
La justificación: una polémica interpretación de la Ley de Memoria Histórica que por aquel entonces no existía y que impulsó el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero en 2007. De ahí partió la Ley de Memoria Histórica de Andalucía aprobada por la Junta en 2017, bajo mandato del PSOE. Una norma cuya derogación ha sido exigida por Vox al Gobierno regional de PP y Ciudadanos. La formación de Santiago Abascal también ha solicitado la comparecencia en el Congreso de los Diputados de la vicepresidenta primera y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo.
Según las actas de aquel Pleno del Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera, consultadas por OKDIARIO, Carmen Flores votó a favor, al igual que el resto de la Corporación gobernada entonces por el PCE, de que la cruz situada junto al Monasterio de San José y San Roque de las Carmelitas Descalzas rendiría el siguiente tributo: «En memoria de los caídos en la Guerra Civil española 1936-1939». Fue a iniciativa del concejal socialista José María Navarro León y salió aprobada con el consenso todas las fuerzas del Consistorio, integrado entonces por PCE, UCD, PSOE y PSA.
Las actas de aquel día lo recogieron así: «El Ilustre Ayuntamiento Pleno acuerda por unanimidad y en votación ordinaria manifestar su aprobación a lo expuesto por el señor Navarro León procediéndose a la sustitución de la mencionada lápida por otra portadora de la inscripción ‘En memoria de los caídos en la Guerra Civil española 1936-1939’». En aquella sesión votó a favor de dicha iniciativa y estuvo presente la actual alcaldesa que ha derribado la cruz, como acredita su firma en las actas de aquel Pleno del Ayuntamiento.
El citado edil socialista defendió la propuesta de este modo: «Me dirijo a vosotros (…) con el ánimo de formular una propuesta en la que plasmo mi parecer sobre la problemática planteada hace unos días con motivo de la retirada de la lápida que contenía los nombres de los denominados ‘Caídos en la Cruzada de Liberación Nacional’. En el momento o en el tiempo en que se colocó esta lápida se quiso simbolizar en la misma el recuerdo de los que murieron en la pasada Guerra Civil Española, pero no se llevó a cabo este simbolismo de forma general como bien pudiera y debiera haberse hecho», afirmó Navarro León.
«Debe perdurar»
«Hoy conseguida la Democracia -continuó el concejal del PSOE-, y lo que es más, estando en el ánimo de todos el olvidar las penalidades y vicisitudes por las que pasó nuestra Nación en aquellos momentos y siendo además esto una realidad, puesto que hemos pasado de un régimen dictatorial a un régimen democrático sin trauma y con una aceptación claramente mayoritaria de todos los españoles, considero que la improcedencia de que se mantenga situada la lápida de referencia, pero al mismo tiempo estimo que el recuerdo de todos los que murieron en la Guerra Civil española debe perdurar, ya que en aquella contienda cada uno defendía los ideales de los que estaba poseído», señaló Navarro León.
Por ello, planteó que «esa lápida conmemorativa se desmonte y sea sustituida por otra con una inscripción que aluda a todos los caídos en general, ya que todos los que murieron en la pasada Guerra Civil eran españoles».
Bajo la nueva placa que resignificaba la cruz y que estuvo durante años en este enclave, el PSOE realizó por ejemplo en 1987, tal y como ha publicado OKDIARIO, un homenaje al último alcalde de la II República, Jose María León, fusilado en 1936 y a todas las víctimas de la Guerra Civil, como rezaba en la inscripción colocada varios años antes para restañar heridas. Mientras ahora socialistas y comunistas se afanan en reabrirlas. La pasada semana, la alcaldesa Carmen Flores se negó a entregar los restos de la cruz a las Carmelitas Descalzas y acabó siendo destruida en una escombrera cercana.