El BCE permitirá a los bancos que se fusionen repartir los gastos por despidos hasta en cinco años
Palo y zanahoria. El BCE, que está presionando a los bancos españoles para que acometan una nueva oleada de fusiones como adelantó OKDIARIO, va a poner de su parte para facilitar estas operaciones: permitirá que las entidades repartan los gastos de reestructuración hasta en cinco años en vez de apuntárselos todos de golpe.
Fuentes de algunas de las principales entidades españolas aseguran que el supervisor europeo les ha trasladado esta medida en las conversaciones regulares que mantiene con el sector. El principal coste de las fusiones es el de reestructuración, eufemismo de reducción de personal por cierre de oficinas y servicios centrales duplicados (así es como se consiguen las sinergias de costes que justifican las fusiones). Y los despidos o prejubilaciones en banca siempre tienen condiciones muy buenas para los empleados y muy costosas para las entidades.
Hasta ahora, los bancos tenían que apuntarse estos gastos de golpe el primer año de una fusión, mientras que los beneficios de estas operaciones solo se obtenían a medio y largo plazo. Y en un contexto como el actual de grave crisis provocada por el covid, que ha obligado al sector a dotar fuertes provisiones para cubrirse del esperado aumento de la morosidad, asumir estos costes en una fusión puede acabar de destrozar sus cuentas.
Prorratear los costes entre tres y cinco años
De ahí que el BCE, que preside Christine Lagarde, haya decidido dar un paso para facilitar estas operaciones que está impulsando y permitir que estos gastos puedan prorratearse en varios años. Según las fuentes, se podrán imputar tanto en la cuenta de resultados como en el capital en un período de entre tres y cinco años.
De hecho, en un documento remitido al sector a principios de verano, el supervisor europeo reconocía que, a la vista de que los costes de fusión deben computarse de golpe mientras los beneficios tardan años en materializarse, «debería ser posible tener en cuenta los planes de integración con trayectorias creíbles para el cálculo del nivel de capital en un horizonte temporal razonable».
Dicho de otra forma, «lo que implícitamente dice el BCE es que podría ser menos estricto con los niveles de capital exigido para transacciones de consolidación, si el registro upfront de los costes de reestructuración provoca una bajada de los niveles de solvencia», explican fuentes de una entidad.
Facilitará que comiencen ya las fusiones
Esta medida eliminará uno de los principales obstáculos para acometer operaciones corporativas en un entorno como este. Como informó OKDIARIO, el BCE ha pedido a la banca española que no espere a que pase la crisis del covid para iniciar la nueva ola de fusiones tal como pretendía el sector, sino que se ponga ya manos a la obra.
El objetivo del supervisor europeo es evitar que la explosión de morosidad que teme que va a provocar la grave situación económica en España se lleve por delante alguna entidad. Como también ha informado este medio, la primera entidad que protagonizará una operación será con toda seguridad Liberbank, aunque todavía no está claro con quién. La primera opción sigue siendo Unicaja, con quien mantiene de nuevo conversaciones tras la ruptura de su acuerdo inicial en mayo de 2019, pero Bankia y Kutxabank también se han interesado por la entidad.