Batalla campal en Vallecas: un herido y un detenido en la pelea entre 300 ultras polacos y del Rayo
Los ultras quedan para pegarse el día antes del partido en Vallecas
La Policía consiguió disolver a los 300 ultras tras una hora de batalla campal con bengalas y cristales rotos
Los ultras polacos se colaron en el estadio del Rayo y "firmaron su hazaña"

El barrio de Vallecas se convirtió anoche en el escenario de la batalla campal entre 300 ultras del Rayo Vallecano y del equipo polaco del Lech Poznan que se había citado para pegarse antes del partido que se celebra hoy jueves en Madrid. Los antidisturbios consiguieron disolver a los contendientes y la batalla se saldó con un herido y un detenido, ambos españoles.
El fútbol es lo de menos, y los ultras de los Bukaneros, de ideología de izquierdas habían quedado para pegarse con los ultras de derechas polacos. La batalla campal comenzó puntual esta noche del miércoles en la Avenida de la Albufera (Vallecas) justo antes de las 00:00 horas del jueves.
La cita para pelear era a la salida del metro. De allí surgieron 150 ultras polacos. Otro número similar de ultras del Rayo Vallecano les estaban esperando. Enseguida comenzaron a lanzarse material pirotécnico, piedras y botellas, para pasar al cuerpo a cuerpo.
Un ultra herido y otro detenido
Los antidisturbios de la Policía Nacional actuaron de inmediato y no sin esfuerzo consiguieron disolver la batalla campal entre los 300 ultras. Al despejar la zona hallaron a un joven inconsciente con heridas en la cabeza y sangrando abundantemente. El herido, español, fue atendido por los policías y posteriormente por los servicios de emergencia que le trasladaron a un hospital donde fue dado de alta poco después.

Más tarde, durante las tareas de vigilancia policial para evitar que se reprodujeran los incidentes, otra unidad policial sorprendió a cuatro encapuchados dándole una paliza a otro ultra. Los agentes detuvieron la agresión de inmediato y consiguieron detener a uno de los agresores, de nacionalidad española.
Previamente, los ultras polacos se colaron en el estadio del Rayo y «firmaron» con pintadas «su hazaña», además de dejar pegatinas en las instalaciones para demostrar su asalto al club madrileño.
El asunto está ahora en manos de la Brigada de Información de la Policía Nacional que investiga para identificar y detener al mayor número de participantes en la batalla campal. Entre tanto, se refuerza el dispositivo de cara al partido que hoy jueves ambos equipos jugaran en el campo del Rayo Vallecano en Madrid.