La OCU alerta: estos coches nuevos tienen un fallo en el diseño y puede costarte 2.000 euros

La Organización de Consumidores y Usuario (OCU) ha lanzado un serio aviso a los propietarios de vehículos diésel que funcionan con el sistema AdBlue. El problema es que se ha detectado un defecto de fábrica generalizado en uno o varios componentes de motores fabricados por PSA que puede provocar un fallo cuyo coste de reparación asciende a 2.000 euros.

Fallo en el sistema AdBlue

El AdBlue es un aditivo que acompaña a los vehículos diésel desde que entró en vigor la norma Euro 6 el 1 de septiembre de 2014. Limita las emisiones de NOx de los motores diésel a 80 mg/km, tal y como explica el ‘RACE’. Lo que hace es transformar las partículas de NOx que salen del tubo de escape mediante una reacción química que recibe el nombre de Reducción Catalítica Selectiva (RCS) en una mezcla compuesta de vapor de agua y nitrógeno que es menos nociva para el medio ambiente.

Aunque AdBlue es la denominación comercial más conocida, también recibe otros nombres como BlueTec, Blue+ o EcoBlue. El fallo del que alerta la OCU se encuentra en las siguientes marcas de coches: Peugeot y Citroën. Todos los vehículos afectados son los fabricados después de 2015.

Los Citröen que presentan el fallo del diseño en el tanque de Adblue son los Aircross, Picasso y C4 Cactus. Mientras, de Peugeot no se han especificado cuáles son los modelos que sufren el problema.

#Coches Miles de usuarios de coches diésel de Citroën y Peugeot llevan años sufriendo las consecuencias de un fallo de diseño en el depósito de Adblue, que les obliga a afrontar costosas reparaciones entre 1.200 y 2.000 euros.
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— OCU (@consumidores) May 29, 2023

«Es un fallo generalizado, bien conocido por el fabricante y los talleres oficiales… pero los responsables se lavan las manos», advuerte la OCU, que también indica que la situación es «intolerable». La solución al problema conlleva la sustitución del depósito de Adblue, lo cual puede costar entre 1.200 euros y 2.000 euros.

«Miles de usuarios de coches diesel de Citroën y Peugeot llevan años sufriendo las consecuencias de un fallo de diseño en el depósito de Adblue, que les obliga a afrontar costosas reparaciones para poder usar el coche. En OCU decimos basta ya y nos movilizamos para ayudarles a defender su derecho y su dinero».

Ante este problema, la OCU ha presentado una denuncia contra Citroën ante la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid. Además, lo ha notificado a las autoridades europeas de la red CPC (Cooperación para la Protección del Consumidor).