La concursante de GH1 que sufrió el revés más duro: la pérdida de su hija y su dura vida

La concursante de GH1 que sufrió el revés más duro ha sido María José Galera, una de las protagonistas de la primera edición de este reality con una vida de lo más triste. Todos recordamos la llegada a la pequeña pantalla de un programa en el que se encerraban a varias personas juntas en una casa, trasmitiendo sus vidas en directo. Jorge y María José se enamoraron y vivieron la separación más dura, al ser expulsada ella del concurso por el público. No era el único golpe que la vida la daría a esta mujer, esta es su historia.

Esta es la concursante de GH1 que sufrió el revés más duro

Como ha cambiado mi vida!!! Ahora mi vida es espiritual y gracias a Mexico por recibirme con los brazos abiertos!! pic.twitter.com/zsf35yxVsq

— maria jose galera (@mjose_galera) August 20, 2013

La mítica frase de Jorge Berrocal, con ese: “Quién me pone la pierna encima para que no levante cabeza!” al haberse separado de su quería María José Galera se recordará siempre en la historia de la televisión. La joven había recibido todo un golpe de suerte al ser seleccionada para este programa, uno de los pocos que la vida le había dado.

Se habló mucho sobre el pasado de María José Galera en la televisión. Había hecho lo imposible para mantener a su familia, algo que la llevaría incluso a ser tachada como mujer que se dedica a estar con hombres a cambio de dinero. Unas acusaciones que estuvieron presentes y que salieron a la luz, Galera justificó su paso por los anuncios clasificados para poder mantener a una de sus hijas con necesidades especiales.

Estefanía era la hija de María José que había nacido con muchos problemas de salud. Sufría parálisis cerebral y necesitaba muchos cuidados. La esperanza de vida de estos pequeños, pese a tener todos los cuidados del mundo suele ser corta. En su caso, acabó falleciendo a los 17 años en casa de sus abuelos.

Perder a una hija es un golpe muy duro que María José tuvo que superar. Ocurrió en 2008 y por aquel entonces decidió cambiar de país para olvidar. Empezó una nueva vida en México que acabó en fracaso. Montó pistas de Pádel en ese país, con algunos socios que acabaron traicionándola. Su inversión acabaría en nada, tuvo que volver a remontar después de vivir en la ruina más absoluta.

La televisión le supuso 6.000 euros por bolo, pero María José lo perdió todo. Trabajó de limpiadora por 5 euros la hora y también estuvo estudiando oposiciones, hasta que se casó. Actualmente está a la espera de poder volver a la pequeña pantalla y recuperarse del duro bache que ha pasado.