¿Cómo es la operación quirúrgica de implante de pestañas?
La operación quirúrgica de implante de pestañas es un procedimiento sencillo. No es agresivo y aporta excelente beneficios para tu salud y apariencia.
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El implante de pestañas es un tratamiento que está aconsejado para personas que las han perdido. Existen múltiples causas por las que alguien puede perderlas, entre ellas el estrés y el paso del tiempo. Su presencia es importante, no solo por estética, sino porque preservan la salud de los ojos. Por fortuna, la operación quirúrgica para reponerlas no es invasiva ni agresiva. Para saber más es importante seguir leyendo.
Algunos detalles de la cirugía
Las pestañas previenen la irritación porque evitan que el sudor caiga en los ojos. Otra de sus funciones es la de ayudar a despejar partículas que podrían dañarlos. Cuando ellas están ausentes, el ojo está expuesto a muchos riesgos.
La operación quirúrgica de implante de pestañas se realiza extrayendo los folículos de algunas partes del cuero cabelludo. Estos se injertan en la zona que se busca repoblar. Suele realizarse en los párpados superiores, donde hay garantías de un mejor crecimiento.
En un procedimiento normal la cifra de vello injertado es entre 50 a 110. Esto va a depender de la densidad y el tamaño que queramos, además de la cantidad de vello existente.
Recuperación y efectos
El tiempo de recuperación tras la cirugía en realidad es bastante corto. En pocos días podremos volver a nuestra rutina. El tiempo de reposo en realidad es para evitar la producción de sudor que pueda afectar la sanación.
En cuanto a las mejoras después de la operación, existen dos principales. En primer lugar, notaremos menos irritación en los ojos, ya que las pestañas los protegen del polvo. En segundo lugar está la parte estética. El efecto del implante enmarca mucho mejor nuestros ojos y también nuestro rostro. Ayuda a que se vea más luminoso y rejuvenecido.
La operación se realiza con anestesia local, lo que nos ayudará a estar más tranquilos. Por esta razón es importante que el proceso se haga con un profesional. De esta forma, el implante de pestañas puede durar varios años intacto.
Tras la cirugía podremos experimentar una sensación de molestia y dolor con un poco de hinchazón. Todo desaparecerá en unos días.
Higiene y diferentes consecuencias
Una buena higiene es fundamental para proteger los ojos. Si por evitar dañar el implante no los lavamos, pueden acumularse partículas en las pestañas y en las glándulas sebáceas que bordean los párpados.
Las consecuencias pueden ser la inflamación del párpado o blefaritis. También los molestos orzuelos, que surgen de infecciones bacterianas en las glándulas sebáceas. Además, aumenta el riesgo de ácaros en la línea de las pestañas.
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