Receta de soufflé de queso parmesano con tomates asados sin gluten

Un soufflé es una preparación delicada de consistencia obligadamente ligera (por algo su nombre proviene del participio pasado de soufflé, que significa inflado, soplado). El soufflé de queso parmesano es una elaboración que se sirve como primer plato, y cuando es dulce, como postre. Se prepara con salsa bechamel y la ligereza se la dan las claras de huevo batidas a punto de nieve.

La salsa bechamel se enriquece con los protagonistas del soufflé, en este caso el queso y los tomates asados, y con las yemas batidas. Después se baten las claras a punto de nieve y se mezcla, y esto hace que al calor del horno la preparación se infle. El soufflé tiene una historia que data desde al menos el siglo XVIII, y ya en el XIX, el plato aparecía en los menús de los restaurantes de grandes hoteles de Francia.

Ingredientes:

Cómo preparar un soufflé de queso parmesano con tomates asados:

1. Precalentar el horno a 180° C.
2. En una cacerola mediana colocar la mantequilla, a fuego medio.
3. Cuando se haya derretido, incorporar la harina y remover con cuchara de madera constantemente para que no se queme.
4. Bajar el fuego y agregar muy lentamente la leche, removiendo siempre hasta que la harina se disuelva.
5. Cuando no queden grumos, añadir el queso parmesano, y seguir removiendo hasta que el queso se derrita.
6. Retirar del fuego y dejar enfriar 5 minutos.
7. Lavar los tomates y cortarlos a la mitad. Asarlos en la plancha bien caliente.
8. Lavar y picar las hojas de albahacas.
9. Separar las yemas de las claras. Batir las claras a punto de nieve y reservar las yemas.
10. Volver a poner la cacerola al fuego, batir ligeramente las yemas e incorporarlas a la salsa, junto con los tomates y la albahaca, batir todo durante un minuto. Salpimentar.
11. Añadir las claras montadas con movimientos envolventes y lentamente, para que no pierdan el aire.
12. Engrasar moldes individuales o un molde grande, verter la mezcla y hornear por 15 o 20 minutos a 200° C.

Sabrás que el soufflé de queso parmesano y tomates asados está listo porque se hincha y toma un color dorado. Sirve de inmediato y da una vuelta de molino de pimienta negra o añade las especias que te gusten. Puedes servirlo como una deliciosa cena ligera.