Receta de Galletas saladas caseras con orégano

Las galletas saladas caseras con orégano son sumamente deliciosas.  Si las acompañamos con una salsa o algún tiempo de queso o fiambres quedarán espectaculares. Esta receta es muy fácil de realizar, pues no requiere de muchos ingredientes ni pasos a seguir. Es ideal para cuando carecemos de tiempo, pero queremos comer un delicioso bocado. Como merienda son una buena opción, también para una reunión en familia como aperitivo.

Nutricionalmente, estas galletas saladas si se consumen con moderación pueden ser aliadas en nuestra alimentación.  Son bajas en grasas saturadas,  perjudiciales para el organismo pues aumentan las posibilidades de padecer enfermedades del corazón y diabetes. Además, su contenido en azúcar es también muy reducido, poseen hierro en grandes cantidades y también potasio, zinc y vitamina K.

La desventaja de las galletas saladas procesadas son sus altos niveles de sodio. Sin embargo, al prepararlas en casa podemos disminuir la cantidad de sal que les agregamos. Así obtendremos unas galletas caseras mucho más saludables.

Ingredientes:

Cómo preparar galletas saladas caseras con orégano:

1. En un recipiente agregamos la harina, el huevo, el agua, la levadura y la cucharadita de sal. Mezclamos muy bien hasta obtener una masa homogénea
2. Llevamos a la nevera durante 30 minutos.
3. Pasado ese tiempo enharinamos una superficie grande y retiramos la mezcla de la nevera. Con ayuda de un rodillo estiramos la masa hasta que quede muy fina.
4. Cuando esté completamente estirada podemos darle la forma que más nos guste. Podemos ayudarnos con un molde para galletas o apostar a nuestra creatividad. Al final, retiramos la masa sobrante.
5. En una bandeja previamente engrasada colocamos papel de horno o vegetal. Encima distribuimos las galletas y las pinchamos con un tenedor. Las espolvoreamos con sal y orégano a nuestro gusto.
6. En el horno previamente calentado a 200° las dejamos durante 15 minutos o hasta que se doren. Hay que estar pendientes de que no se quemen.
7. Pasado ese tiempo las sacamos del horno y dejamos enfriar durante varios minutos. Están listas para servir.

Estas galletas saladas caseras con orégano son una muy buena opción cuando tenemos algún antojo o para ofrecerles a nuestros invitados. En la merienda serán la delicia de los comensales, gracias a que su sabor es delicioso y su textura es increíble. Las puedes acompañar con las salsas o ingredientes que más te gusten. Atrévete a probarlas, verás como no te arrepentirás.