Lubina a la sal

El plato de lubina a la sal es una excelente y deliciosa excusa para incorporar todas las propiedades de alto valor nutritivo que contiene este pescado. Su textura suave y delicada satisface a los paladares más exigentes. Este pescado es también conocido con el nombre de Robalo. Contiene un sabor fino y delicado, pero lo que lo convierte realmente en útil es que prácticamente no contiene espinas. Esta virtud lo vuelve uno de los pescados más fáciles y rápidos de cocinar.

La lubina es un pescado blanco que contiene 19,30 gramos de proteínas. Aunque el nivel de carbohidratos es nulo, se encuentran 2,30 gramos de grasa por cada 100 gramos de Lubina. Este pescado es también un alimento rico en potasio y fósforo; contiene 410 gramos de fósforo cada 100 gramos de carne. Este mineral está involucrado en la formación del colágeno que contienen los tejidos, a la vez que permite tener dientes y huesos fuertes y saludables.

Ingredientes:

Elaboración:

1. Poner la sal gruesa en un bol grande. Picar las hierbas finamente y añadirlas junto con las pimientas. Mezclar bien y agregar una cucharada de agua.
2. Precalentar el horno a 200°C.
3. Colocar una capa de sal gruesa en el fondo de una bandeja de horno.
4. Sin quitarle las escamas, colocar las lubinas sobre la capa de sal y cubrirlas con otra capa del mismo mineral.
5. Introducir la fuente en el horno y asarlas.
6. Picar en dados los pimientos verdes y rojos. Ponerlos a pochar en una sartén con aceite.
7. Agregar el calabacín cortado en dados a la sartén.
8. Dejar cocinar por aproximadamente 15 minutos, en función del tamaño de la pieza. No debe pasarse de coccción.
9. Triturar o picar el perejil.
10. Sacar la placa del horno y retirar la sal.
11. Cortar la cabeza de las lubinas, y apartar los lomos con suavidad.
12. Añadir encima de los lomos un chorro de aceite de oliva virgen y el perejil.
13. Servir un lomo por plato acompañado de la mezcla de verduras.