Es el momento de Cristiano
Lo dije la semana pasada en un artículo de opinión: “Más importante que cómo salga UPYD de su Congreso Ordinario… es cómo salgamos cada uno de nosotros: nuestra actitud, nuestra disposición y nuestra voluntad futura…”. Porque, efectivamente, UPYD sale del Congreso Ordinario que acabamos de celebrar este fin de semana en Alcalá de Henares con los mismos afiliados, los mismos cargos públicos y la misma presencia mediática que como entró. Un año después de haber evitado ser disueltos obligatoriamente, es cierto que estamos vivos —y seguramente más unidos hoy que el viernes pasado—, pero no tenemos la fuerza suficiente como para tener incidencia directa en la política nacional, más allá del enorme trabajo que hace Maite Pagazaurtundua en Europa y el que desempeñan nuestros 130 concejales a lo largo y ancho de España, alcaldes incluidos. Sin embargo, al estar vivos, todo es posible y, si nuestra actitud es la apropiada y actuamos con inteligencia y sin atisbo de sectarismo, estaremos en disposición de cosechar los frutos merecidos que se nos resisten. Y pasado el fin de semana, observo que la actitud es la correcta y que, por lo tanto, hay esperanza.
El pasado fin de semana en Alcalá de Henares dije que 2017 se presenta como un año políticamente muy interesante. Que, por lo tanto, como ciudadanos comprometidos que quieren hacer de verdad política y servir a los ciudadanos, deberemos estar atentos a todo lo que suceda y los movimientos que se produzcan. Hoy día hay millones de huérfanos políticos que no encuentran el partido al que reconducir su voto desde la abstención o desde el que se emite con la nariz tapada. Por tanto, debemos ser capaces de responder a esa realidad.
Es obligación de todos nosotros conversar con otros: con los que piensan parecido y con los que piensan distinto. Con los que piensan parecido, para sumar (y no me refiero necesariamente a partidos políticos concretos y mucho menos a los que tienen presencia en el Congreso de los Diputados sino más bien y sobre todo a colectivos, asociaciones y personas con ganas de pelear por unas ideas que siguen siendo necesarias) y con los que piensan distinto, para contrastar ideas y puntos de vista. Conversar con los que piensan parecido crea sinergias y conversar con los que te llevan la contraria es el mejor antioxidante que existe. Y en España, una quimera que debemos hacer que sea lo más normal del mundo. Así que ambas cosas son las que cualquier político debe practicar permanentemente. Cada uno de nosotros.
Por un lado, en España hay millones de huérfanos políticos a los que podemos y debemos dar respuesta; por otro lado, durante las próximas semanas van a pasar muchas cosas (algunas ya están pasando) y va a haber movimientos en la práctica totalidad de los partidos políticos (los estamos viendo). Por lo tanto, actuemos con inteligencia y altura de miras… y antepongamos los intereses de España y de los españoles a los propios. Seamos capaces de innovar y de sumar. Seamos listos y audaces.
Cristiano Brown es el nuevo líder de la formación magenta: esa persona que, desde UPYD, puede generar las condiciones internas necesarias para mantener esa actitud constructiva y eminentemente política. Bunquerizarse es la opción más antisocial y ridícula que en política pueda darse. No es el caso. Cristiano es un tipo trabajador que cree en lo que hace y una persona integradora que va con la verdad por delante. Ayudemos a Cristiano y a su equipo, estemos atentos a los acontecimientos y, cuando haya que actuar y tomar decisiones, seamos inteligentes. Hay muchas cosas por las que luchar en España y en Europa: nosotros solos no podemos porque no tenemos fuerza suficiente; afortunadamente, miles de personas que no están en UPYD ni en ningún otro partido comparten ideas parecidas y los mismos objetivos. Pues eso.