Limpieza

Consejos para limpiar las botas de agua

Las botas de agua son un complemento de moda que puede dar mucho estilo

limpiar las botas de agua
Las botas de agua son un complemento de moda que puede dar mucho estilo

Las botas de agua son un calzado imprescindible en esta época del año, ya que es cuando más suele llover y debemos llevarlas para evitar mojarnos los pies. Si quieres saber cómo limpiar las botas de agua, sigue leyendo y descubre las claves para hacerlo bien y no llenarlo todo de barro tras un día de lluvia.

Aunque están especialmente diseñadas para los días de lluvia, las botas de agua se han convertido en un complemento tan importante en lo que a moda se refiere que ya no se utilizan únicamente cuando llueve.

Pasos para limpiar las botas de agua

  • Después de cada uso debes limpiar tus botas para eliminar cualquier resto de agua o suciedad. Puedes utilizar un trapo para ello si toda la suciedad es líquida y sale fácilmente.
  • Si las botas tienen barro y ya se ha secado, utiliza un cepillo de cerdas medianas para eliminarlo, es lo más eficaz.
  • En el caso de que haya mucho barro o tierra incrustada, mezcla una cucharada de detergente para vajillas (Fairy, Mistol, etc) con dos vasos da agua tibia y sumerge un paño en la mezcla. Limpia las botas con ese paño y enjuaga con agua y un paño limpio.
  •  Debes esmerarte también en limpiar las suelas, puedes hacerlo con un cepillo de dientes viejo que lógicamente no utilices en tu boca. Con él podrás eliminar el barro rápidamente.
  • Una vez que las botas están totalmente limpias, pasa por ellas un paño humedecido en agua tibia para darles brillo y eliminar cualquier resto que hubiera podido quedar.
  • Deja que se sequen al aire libre, podrían estropearse si las expones a una fuente de calor para que lo hagan. Tampoco las pongas donde reciban directamente la luz del sol ya que la goma podría estropearse.
  • Es importante que con cierta regularidad limpies también el interior de las botas. Puedes hacerlo con una mezcla de una cucharada de detergente líquido para la ropa y dos vasos de agua. Empapa un paño en esa solución y limpia el interior para después sumergir un paño limpio en agua tibia y enjuagar el interior de la bota.

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