CÓNCLAVE

OKDIARIO caza al cardenal Cobo a menos de 12 horas que comience el Cónclave

José Cobo es arzobispo de Madrid y afín a la corriente más reformista de la Iglesia

El cardenal protagonizó como "mediador" la polémica sobre la profanación del Valle de los Caídos

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El cardenal José Cobo.
Paula Ciordia

A sólo unas pocas horas de que dé comienzo la Santa Misa para elegir al próximo Pontífice, el cardenal español José Cobo se ha dejado ver a últimas horas de esta pasada noche del martes de vinos en un restaurante a escasos metros del Vaticano.

OKDIARIO ha cazado al arzobispo de Madrid en un tono desenfadado en la víspera que comience el Cónclave que elegirá al sucesor de San Pedro, es decir, al Vicario de Cristo, y motivo por el cual se invocará al Espíritu Santo en un ritual milenario para que ilumine la elección de los cardenales y para lo que se lleva pidiendo a los fieles de todo el mundo que recen en comunión –e incluso que ayunen– a fin de que salga escogido un Papa Santo.

Algo que sorprende si se compara con la despreocupada actitud que mostraba este cardenal elector de 59 años, vestido sin su indumentaria cardenalicia con una simple camisa clériman y unos pantalones negros. Si bien, hasta este miércoles, los cardenales no están obligados a permanecer encerrados y pueden llevar una vida normal.

El cardenal Cobo estaba sentado en una mesa junto a cuatro mujeres y un sacerdote cenando, visiblemente tranquilo e incluso haciendo bromas al salir del restaurante respecto al día del Cónclave. Una actitud que contrasta con la de otros cardenales, como el norteamericano Raymund Burke, quien desde comienzo de semanas pidió que se redoblaran las oraciones «por la gravedad de la situación» en torno al cónclave. O con la de Gerhard Müller, quien ha pedido revertir los cambios emprendidos por el Papa Francisco y rezar por que no salga elegido «un Papa hereje».

La mayoría de cardenales llevan instalados en la Casa de Santa Marta desde la tarde del pasado martes, tras finalizar las Congregaciones previas. En la residencia creada por órdenes de San Juan Pablo II deberán residir todos los cardenales electores a partir de este miércoles. Ahí permanecerán aislados hasta que elijan al nuevo Papa.

A partir de esta mañana, ninguno de ellos podrá mantener contacto con nadie del exterior, conversaciones telefónicas ni de cualquier tipo ni tan siquiera tener acceso a consultar los medios de comunicación, tal y como estipula la Constitución Apostólica redactada por San Juan Pablo II, Universi Dominici Gregis, promulgada en 1996, ligeramente modificada por Benedicto XVI y Francisco.

Cobo, próximo a Francisco

José Cobo ha sido muy próximo durante estos años al Papa Francisco y su sintonía se evidenció con sus cargos. En junio de 2023 fue nombrado arzobispo de Madrid y, apenas tras tres meses más tarde, fue creado cardenal. En 2024, asumió el cargo de ordinario para los fieles del rito oriental en España y ese mismo año, fue elegido vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE).

Su presencia en Roma se ha multiplicado desde que forma parte del Dicasterio para los Obispos, del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, del Dicasterio para las Iglesias Orientales. En los últimos meses, el Papa también le encargó coordinar un grupo de trabajo mundial para reformar el plan de estudios de los futuros sacerdotes.

En su papel como mediador en el diálogo con el Gobierno de Pedro Sánchez para la «resignificación» del Valle de los Caídos, el cardenal José Cobo se ha situado en el centro de la polémica por un proyecto que plantea la transformación de la nave mayor de la basílica en un museo y la desacralización de las capillas adyacentes al altar mayor, incluida la del Santísimo.

La propuesta ha sido calificada por diversos sectores como una profanación del templo, y ha generado una fuerte reacción entre parte de los fieles, que han mostrado su rechazo a las negociaciones encabezadas por el purpurado. Las protestas frente a la sede de la Conferencia Episcopal Española han evidenciado ese malestar, con consignas y pintadas como «Obispos, vendéis a Cristo por 30 monedas». Cobo, por su parte, ha adoptado una postura de aceptación ante el proyecto.

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