Cómo limpiar el acero inoxidable
Muchos son los objetos de acero inoxidable que podemos tener en casa, ya sean cubiertos por ejemplo o grifos, y sabemos como estos tienen tendencia a perder su brillo natural después de un tiempo de modo que vamos a explicarte a continuación, una sencilla guía de pasos para saber cómo limpiar el acero inoxidable.
La humedad, la suciedad, la cal y el tiempo, originan las manchas del acero inoxidable que suelen ser bastante «feas», aunque por suerte para nosotros, tenemos varios remedios naturales que se encuentran fácilmente disponibles en todos los hogares con las que vas a poder eliminarlas sin ningún problema. Vamos a ver entonces cuáles son y como se aplican.
Vinagre para limpiar el acero inoxidable
El vinagre es una sustancia formidable para restaurar el brillo del acero inoxidable que se ve muy manchado y opaco. Tan solo tienes que humedecer una esponja en vinagre y la pasas sobre toda la superficie a tratar, luego enjuaga con agua tibia y seca bien, para evitar la formación de nuevas manchas.
Limón para limpiar el acero inoxidable
También el zumo de limón , por su alto contenido de ácido cítrico, es un excelente aliado en la limpieza del acero inoxidable. Es particularmente efectivo para eliminar en especial las manchas de agua y cal en los grifos. Puede usar una esponja empapada en jugo de limón diluido en agua o puro en el caso de piedra caliza que es particularmente abundante y resistente. Alternativamente, puedes frotar el interior de un limón ya exprimido sobre el acero inoxidable , el resultado será igual de bueno.
Bicarbonato para limpiar el acero inoxidable
Si necesitas limpiar las ollas de acero inoxidable que están manchadas o sucias, prepara una pasta con bicarbonato de sodio mezclado con jabón y agua tibia. Este compuesto ablandará de inmediato las incrustaciones que serán mucho más fáciles de eliminar. Además, no correrá el riesgo de arañar la olla de forma irremediable.
Ceniza para limpiar el acero inoxidable
Por último te ofrecemos una receta que os puede parecer realmente sorprendente, aunque es muy efectiva para limpiar el acero inoxidable. En una olla vieja debes hacer lo siguiente: hervir 100 gramos de ceniza de madera en medio litro de agua . Mezcla con el fuego bajo y revuelve ocasionalmente con un palo de madera. Apaga después de una hora y media. La pasta que obtendrás será excelente para eliminar incrustaciones o restos de manchas de la opacidad que aporta el acero inoxidable. Coge un estropado de acero, y frota la pasta sobre los grifos, ollas, cubiertos o cualquier elemento de acero inoxidable que desees poder restaurar y recuperar al completo. Comprobarás como este es quizás uno de los mejores remedios para este problema.
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