Los ronquidos de Ábalos han tenido a Koldo en vela durante la primera noche juntos en prisión
El ex ministro y su ex asesor, que compartieron celda, "estuvieron hablando hasta altas horas de la noche"
Fueron advertidos por personal funcionario de Soto de Real para que "guardaran silencio"

José Luis Ábalos, ex ministro de Transportes y ex secretario de Organización del PSOE de Pedro Sánchez, y su entonces asesor, Koldo García, tuvieron problemas para conciliar el sueño en su primera noche en la prisión madrileña de Soto del Real. Según fuentes consultadas por OKDIARIO, ambos compartieron celda en el módulo de ingresos y «estuvieron hablando hasta altas horas de la noche», en torno a las 02:30 horas de la madrugada de este viernes.
Las mismas fuentes relatan que a estas horas incluso fueron advertidos por personal funcionario de la prisión de Soto de Real para que «guardaran silencio». Tras ello, Ábalos sí se quedó dormido, mientras que Koldo «no consiguió pegar ojo por los ronquidos de su compañero de celda», señalan tales fuentes. Los dos ingresaron en Soto del Real este jueves por orden del juez Leopoldo Puente tras su llegada en un furgón de la Guardia Civil a las 18:09 horas.
El ex asesor de Ábalos ha tenido que asistir esta mañana en la capital a una declaración como investigado en la Audiencia Nacional en el caso de las mascarillas, que incluye los contratos adjudicados a empresas de la trama por el Gobierno canario que presidía el actual ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres. Koldo ha optado este viernes por acogerse a su derecho a no declarar, siguiendo así la estrategia de sus últimas comparecencias en el Tribunal Supremo.
Koldo llegó a la Audiencia Nacional desde la cárcel de Soto del Real -con una distancia de 40 kilómetros entre ambos puntos- en un furgón de la Guardia Civil hacia las 8:45 horas. Estaba citado a las 10:00 de la mañana y la vista ha durado apenas 20 minutos, porque se ha acogido a su derecho a no declarar.
Koldo, «cabizbajo»
Fuentes jurídicas presentes en el interrogatorio aseguran que llegó «cabizbajo», con mala cara, vestido con vaqueros y un polar azul. El ex asesor de José Luis Ábalos entró acompañado de cinco policías y sin esposar. El titular del Juzgado Central de Instrucción número dos de Madrid, Ismael Moreno, pidió a los asistentes que no tomasen fotografías.
Por su parte, el juez instructor de la trama PSOE en el Tribunal Supremo, Leopoldo Puente, envió a prisión este jueves al custodio de los avales de las primarias de Pedro Sánchez en 2017 y a José Luis Ábalos, al apreciar en ellos un riesgo «extremo» de fuga debido a los «sólidos indicios» en su contra.
Puente detalló en el auto de prisión la proximidad del juicio por la presunta trama de mascarillas en el Ministerio de Transportes; la elevada pena que se les reclama: hasta 30 años de cárcel; y la sospecha de que cuentan con dinero oculto y contactos internacionales que le permitirían darse a la fuga.
Evaluación
Koldo y Ábalos permanecerán como presos preventivos un máximo de cinco días en el departamento de ingresos de Soto del Real, con el objetivo de ser evaluados por los técnicos de la cárcel y asignarles una celda, tal y como estipula el protocolo de acceso a prisión.
El primer ingreso está regulado por el artículo 20 del Reglamento Penitenciario, que dicta las pautas sobre «modelos de intervención y programas de tratamiento». En este sentido, el primer paso fue ocupar una celda -en este caso, la misma para los dos- en dicho departamento de ingresos, donde habrían sido examinados por el médico «a la mayor brevedad posible».
Como el resto de presos preventivos, Ábalos y Koldo tendrán que ser entrevistados por un trabajador social y por el educador, «a fin de detectar las áreas carenciales y necesidades del interno». Soto del Real es un centro tipo y la prisión de referencia para los presos preventivos en la Comunidad de Madrid.
El artículo 20.3 estipula que la estancia de preventivos o penados en el departamento de ingresos será, como máximo, de cinco días y sólo podrá prolongarse por motivos de orden sanitario o para preservar su seguridad. De la prolongación se tiene que dar cuenta al juez de vigilancia penitenciaria correspondiente.
Son los profesionales de la prisión los que emitirán un primer informe sobre la propuesta de separación interior en una celda, conforme a lo dispuesto en el artículo 99, o de traslado a otro centro si así se considerara. También se establece la planificación educativa, sociocultural y deportiva y de actividades de desarrollo personal para cada interno.
«Respetando el principio de presunción de inocencia, la Junta de Tratamiento, de acuerdo con dicho informe, valorará aspectos tales como ocupación laboral, formación cultural y profesional o medidas de ayuda, a fin de elaborar el modelo individualizado de intervención», fija el Reglamento Penitenciario.