El PSOE no se da por aludido por el aviso del Rey: «Estamos comprometidos con la Constitución»

Mientras siguen adelante con la Ley de Amnistía y deslegitiman a los jueces, los socialistas han asumido como propio el mensaje de Navidad de Felipe VI quien, en su discurso, realizó un firme alegato en favor de la Constitución con implícitas advertencias al Gobierno de Pedro Sánchez. El PSOE asegura compartir con el Rey el «compromiso» con la Constitución y, ello, tras pactar con los partidos que persiguen, precisamente, el fin de la Monarquía constitucional.

La presidenta del partido, Cristina Narbona, ha destacado las palabras del monarca, quien advirtió que «para que la Constitución desarrolle plenamente su cometido no sólo se requiere que la respetemos, sino también que conservemos su identidad» y «preservemos su integridad». Una advertencia nítida del jefe del Estado mientras Sánchez y sus socios manipulan la Carta Magna a conveniencia para ajustarla a sus intereses políticos.

«El valor de la libertad, de la igualdad, de la justicia y de la pluralidad política… Todo eso forma parte de un acervo que estamos comprometidos a defender. Estamos comprometidos a defenderlos y, como dice el monarca, debemos hacerlo todos los días, respecto a todos los artículos de la Constitución y por parte de todas las instituciones», ha asegurado Narbona, citando en ese compromiso a «las instituciones del Poder Ejecutivo, tanto el Gobierno central como los gobiernos de Comunidades Autónomas y Ayuntamientos, el Poder Legislativo, Congreso, Senado, Asambleas parlamentarias… Y, por supuesto, el Poder Judicial y también los partidos políticos, que son herramientas básicas de nuestra democracia». 

Narbona ha añadido que, como el Rey, el PSOE cree que «España es un gran país y que podemos avanzar juntos». Y, en un claro gesto a las negociaciones de Sánchez con sus socios separatistas, ha precisado: «Podemos avanzar desde esa unidad que reconoce la diversidad y podemos avanzar desde el respeto que permita aproximar posiciones respetando el marco constitucional». 

«Debemos seguir trabajando en el marco de esa Constitución y creemos que preserva la unidad de España gracias a cómo integra la diversidad. La diversidad de lenguas, de culturas, de instituciones. Esa unidad en la diversidad nos hace un país más fuerte y garantiza esa necesaria convivencia», ha insistido. 

Ataques de los socios

En su mensaje, Felipe VI lanzó un contundente aviso, implícito, al Gobierno de Sánchez y sus aliados, ante sus ataques a la Constitución y el Poder Judicial.

Los socios separatistas del PSOE han criticado este lunes el discurso del Rey, calificándolo de «irrelevante» y acusando incluso a Felipe VI de «fomentar el germen de la discordia».

«Siempre actúa de parte, de parte de estos que son afectos al régimen», ha afirmado el secretario general de Junts, Jordi Turull, para quien el Rey «ha renunciado a ser árbitro». Junts ha afirmado incluso que Felipe VI «no tiene legitimidad moral para hablar de no fomentar el germen de la discordia».

«Si algún discurso lo fomentó fue el que hizo el 3 de octubre de 2017 y por el que aún no ha pedido perdón», ha señalado el portavoz separatista, que ha añadido que «habla de unidad, pero es una unidad a golpe de porras y togas y eso nunca puede funcionar».

Además, ha añadido que el ex presidente Carles Puigdemont volverá a España. Cabe recordar que actualmente se tramita la Ley de Amnistía pactada por Sánchez con el separatismo, que permitirá el regreso de Puigdemont tras quedar anuladas las acusaciones contra él.

También ERC se ha sentido interpelado por el mensaje rotundo del monarca. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, ha considerado que el discurso de Navidad del Rey es una continuidad del que hizo tres días después del 1-O, «y la mejor muestra es que la derecha y la extrema derecha lo aplauden».

Según Aragonés, fue un discurso «nacionalista español, un discurso con el cual la ciudadanía de Cataluña no se siente representada. De hecho, no se siente representada tampoco por la Monarquía». «Resonaban aquellas palabras del 3 de octubre del 2017, aquella fecha en que los pocos lazos que tenía la Monarquía aún con algunos catalanes y catalanas se rompieron», ha añadido.

Desde Sumar, socios del Gobierno de coalición, han tachado el mensaje de Navidad de Felipe VI de «anclado en el pasado» y «decepcionante». Según la portavoz del partido en el Congreso, el monarca no se dirigió «al conjunto del país», pese a realizar una férrea defensa de la Constitución.

«Es un discurso anclado en el pasado porque apenas habló de los derechos sociales, hizo una lectura muy restrictiva de la Constitución, no habló de los problemas que le preocupan a los españoles y españolas», ha sentenciado Lois. Además, ha criticado que el Rey no mencionase el conflicto en Palestina. «Era el momento para exigir el alto al fuego y que se respete el derecho internacional».

Por su parte, Ione Belarra, secretaria general de Podemos, también ha sido crítica: «Cada vez más convencida de que la monarquía se ha quedado definitivamente atrás y de que Felipe VI va a ser el último», ha aseverado en sus redes sociales.

Desde el PNV, su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, ha afirmado que el Rey ha obviado en su discurso lo que ha calificado de «discrepancias constitucionales».

«Es como si las discrepancias constitucionales, que donde las hay, sobre todo, es precisamente en Euskadi y en Cataluña, los movimientos políticos, las razones que pudiera haber para esas discrepancias constitucionales, sobre eso no hay nada que decir, cuando se va a hablar durante todo el discurso de la Constitución», ha destacado.

Al PNV, socios también del PSOE, le ha molestado que, según ellos, el Rey hable de España «como única Nación». «Es un discurso que no se hace pensando en los nacionalistas vascos o los nacionalistas catalanes, incluso los gallegos. Desde luego, es un discurso que va más centrado a PP, PSOE, Vox, incluso», ha manifestado.