Sánchez, con 40.000 muertos: «Hablamos de la emergencia sanitaria, pero la real es la climática»
Sánchez se jacta del infectódromo del 8-M y desafía a la juez: "¡Viva el 8 de marzo!"
Sigue en directo la última hora del coronavirus
España atraviesa una crisis económica y social sin precedentes debido al coronavirus. Esta pandemia ha dejado hasta el momento casi 40.000 fallecidos, pero para Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, existe otra emergencia aún más importante, la climática. «Hablamos de emergencia sanitaria pero la real emergencia que tenemos por delante es la emergencia climática que tenemos que dar respuesta», ha asegurado.
Así lo ha afirmado públicamente Sánchez durante su intervención en el debate de la prórroga del estado de alarma este miércoles en el Congreso de los Diputados. Previsiblemente, esta prórroga, la sexta hasta ahora, saldrá adelante gracias al apoyo de Ciudadanos y del PNV, además de la abstención de ERC.
Vox ha cargado contra Pedro Sánchez por dar prioridad a la «emergencia climática» antes que la del coronavirus, pandemia que ha dejado hasta el momento casi 40.000 muertos en España. «Son criminales a los que sólo les preocupa su agenda ideológica», ha afirmado el partido conservador a través de un mensaje colgado en su perfil oficial de Twitter.
Son criminales a los que sólo les preocupa su agenda ideológica. pic.twitter.com/a0kzxQCDow
— vox_es (@vox_es) June 3, 2020
«¡Viva el 8-M!»
Durante su intervención, Sánchez también se ha jactado de la manifestación feminista del 8-M en Madrid que se celebró pese a la amenaza de la pandemia. En los días posteriores el dirigente socialista decretó el estado de alarma debido al descontrol del coronavirus. «¡Viva el 8 de marzo!», ha jaleado desde el tribuna del Congreso el jefe del Ejecutivo.
Con esta defensa, también ha querido presionar a la titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Carmen Rodríguez-Medel, quien investiga la celebración multitudinaria del 8-M pese a que el coronavirus estaba ya desbocado en la capital para entonces. También presiona de esta forma al al trabajo de la Guardia Civil en sus informes como Policía Judicial en esta causa.
En la sesión de control al Gobierno celebrada en la Cámara baja, Sánchez ha tratado así de intimidar a la magistrada, justo días antes de que tome declaración al delegado del Gobierno en Madrid, el socialista José Manuel Franco, imputado por un presunto delito de prevaricación. Esta ha sido la forma elegida por Sánchez para respaldar entre líneas a su ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, después de que la oposición haya pedido su dimisión por la polémica destitución del coronel Diego Pérez de los Cobos, al que Interior acusa de no mantenerle informado de la investigación del 8-M, algo totalmente ilegal.
El también dirigente del PSOE ha acusado desde la tribuna de oradores a la oposición de utilizar «la bandera de todos» como «un arma» para atacar a su Ejecutivo durante la pandemia. «La bandera es la de todos, representa nuestra lengua y nuestro paisaje, pero sobretodo nuestra voluntad de vivir juntos», ha enfatizado.
Pedro Sánchez ha asegurado que «hay muchas formas de concebir nuestro país y nuestro futuro, pero todos ellas son España». El jefe del Ejecutivo ha reivindicado que «nuestros padres no se sacrificaron para esto», para crear «unos símbolos que fueron creados para lo que nos une, que es mucho más que lo que nos separa». En este sentido Sánchez ha avisado que «el virus no puede ser el pretexto para dividir, para combatir al adversario».
«Como gritar ¡Viva la enfermedad!»
Santiago Abascal, líder de Vox, ha cargado contra el presidente del Gobierno por jalear la manifestación feminista del 8-M desde el estrado de la Cámara Baja. Para el líder de la formación conservadora, jalear esa concentración es «tanto como gritar ¡Viva la enfermedad! y ¡Viva la muerte!». Y es que las manifestaciones feministas del 8-M no sólo dispararon los contagios de coronavirus, como demuestran los datos de Sanidad, sino que su permisión en Madrid, con más de 120.000 asistentes, ha llevado al delegado del Gobierno, José Manuel Franco, a ser imputado por un presunto delito de prevaración.
«Esto no lo pueden maquillar ustedes: decenas de miles de muertos por el sectarismo y la negligencia criminal de este Gobierno», ha enfatizado después Abascal en su respuesta a Pedro Sánchez, al que también ha criticado su ataques a la oposición por enarbolar la bandera de España frente a sus pactos con los separatistas catalanes y los proetarras.
Santiago Abascal ha apostillado que «basta con que exijan a sus cómplices de investidura que no quemen la bandera y no la arríen de edificios oficiales, o a los militantes de Podemos que la ondeen como hace en Francia todos los partidos. Aquí lo único que se arrebata es lo que ustedes han tirado al suelo».
Abascal ha respondido también a las acusaciones de Pablo Iglesias de la semana pasada, en las que el vicepresidente segundo del Gobierno se burló de Vox atribuyéndole una intentona de «golpe de Estado».
«Creo que el señor Iglesias desea una guerra civil, pero yo no voy a decir que no se atreve, porque creo que en su vanidad y en su fanatismo es capaz de provocar cualquier drama», ha denunciado.