El marroquí del ataque a machetazos en Mataró tenía una alerta de Francia por yihadista

El marroquí que, armado con un machete y al grito de «¡Alá es grande!», llevó a cabo un ataque contra otros musulmanes en Mataró (Barcelona) el pasado domingo, tenía un control específico de Francia por asuntos de terrorismo yihadista.

Los Mossos d’Esquadra, tras las pesquisas iniciales, descartaron cualquier vinculación del ataque de Mataró con el terrorismo yihadista. Los policías catalogaron los hechos como actos de un perturbado bajo los efectos del alcohol y las drogas, pese a que en su teléfono también se halló información relacionada con el terrorismo yihadista. Tampoco tuvieron en cuenta que durante el ataque el detenido profiriera gritos de «¡Alá es grande!» ni consignas yihadistas.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 20:00 horas del domingo en la calle de La Mata de Mataró. Allí, el hombre de origen marroquí armado con un machete y con gran violencia empezó a dañar los vehículos aparcados y el mobiliario urbano.

Aparentemente, y sin elegir a ningún objetivo concreto, el atacante continuó con su agresión hasta herir a dos personas que sufrieron cortes en los brazos, además de destrozar todos los vehículos que se encontraba estacionados en la vía pública.

Ambos heridos, después de ser atendidos de los cortes, prestaron declaración en comisaría. Aseguraron que no dudaban que el marroquí tenía intención de matarlos y que no paraba de gritar proclamas yihadistas de carácter terrorista.

Sin embargo, para los Mossos d’Esquadra ha pesado más la adicción al alcohol y drogas del atacante que las proclamas terroristas que lanzaba y que dan por confirmadas los testigos. Los Mossos sí tuvieron en cuenta que el agresor se encontraba bajo tratamiento por problemas mentales, a pesar de que Francia había impuesto un control específico por terrorismo yihadista sobre esta persona.

El teléfono del atacante

Todavía más, cuando llevaron al detenido a la comisaría, los agentes de los Mossos pudieron comprobar que el marroquí arrestado intentaba enviarle a un tercero la localización de esa dependencia policial. Extrañados, tras examinar el terminal telefónico del detenido los agentes hallaron en su interior información relacionada con el terrorismo islámico.

Ahora, el caso lo lleva la Unidad de Investigación de la Comisaría de Mossos d’Esquadra de Mataró, y no los expertos en Información de la Policía autonómica.

Estos últimos sí fueron alertados al comienzo de los hechos por la posible relación del atacante con el terrorismo yihadista. Sin embargo, los expertos en terrorismo islámico se retiraron del caso tras evaluar en un primer momento que el detenido podría tratarse de una persona en tratamiento con un trastorno psiquiátrico.