García Castellón pide a la Policía el informe que hizo la Brigada de Revisión de Casos sobre el 11-M
El juez Manuel García-Castellón, que investiga el ‘caso Tándem’ por el que se encuentra en prisión preventiva el ex comisario José Manuel Villarejo, ha solicitado a la Policía el informe sobre el 11-M que elaboró la Brigada de Análisis y Revisión de Casos (BARC) creada en 2015 por el ex jefe de la Policía Nacional, Eugenio Pino.
Unas semanas después de disolverse esta brigada secreta en febrero de 2017, la Dirección General de la Policía comunicó que la comisaria jefe de la brigada localizó un documento sobre el 11-M y se lo entregó al nuevo director adjunto operativo (DAO), Florentino Villabona. Previamente, el informe fue examinado por expertos.
Unos días después, la Dirección General de la Policía envió un CD al Fiscal Jefe de la Audiencia Nacional, Jesús Alonso Cristóbal, con el informe en formato PDF elaborado por la brigada sobre los atentados del 11 de marzo de 2004.
Ahora, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 ha solicitado este documento después del comunicado enviado por el comisario jubilado en el cual señala que conoce «la autoría real del atentado» y solicitaba la desclasificación de los documentos secretos.
La Brigada de Análisis y Revisión de Casos (BARC), disuelta tras la llegada de Forentino Villabona como nuevo DAO de la Policía, fue creada para investigar casos sin resolver y se encargó de asuntos como el 11-M, el caso Faisán o Marta del Castillo.
Citará a Villarejo
García-Castellón ha decidido citar a declarar al ex agente encubierto tras la misiva remitida al Juzgado donde aseguraba que puede probar que no se investigó la autoría real de los atentados de Atocha y que fueron planeados por otro país encargado de diseñar «el protocolo de actuación de la masacre del 11 de marzo de 2004». Para ello advierte que está «dispuesto a llegar hasta el final» para defenderse.
Según el ex agente infiltrado, dispone de «informaciones que se encuentran constatadas en los documentos incautados –se refiere a la documentación incautada en su domicilio- y que señalan qué Estado diseñó el protocolo de actuación del atentando, produciendo una ejecución a través de una muy bien estudiada operación de inteligencia cuyo fin último era condicionar -como así ocurrió- el comportamiento del votante español».
El titular Juzgado de Instrucción número 6, al frente de la instrucción, decidirá reabrir o no la la investigación del 11-M, una vez que examine el documento que elaboró la Brigada de Análisis y Revisión de Casos y tras tomar declaración a Villarejo. Fue este mismo magistrado, García-Castellón, quien investigó la masacre ejecutada hace 15 años y que se cobró la vida de 192 de personas.