Tauromaquia

Otra embestida del Gobierno a la tauromaquia: Bustinduy niega el lleno en las Ventas

El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 obvia los datos: "No se refleja en las estadísticas de asistencia"

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El ministro Pablo Bustinduy. (Foto: EP)
Paula M. Gonzálvez

El Gobierno de Pedro Sánchez ha vuelto a embestir contra la tauromaquia tras el ataque del ministro de Cultura Ernest Urtasun, aunque esta vez ha sido Pablo Bustinduy el que ha propinado el golpe al negar el lleno en la plaza de toros de Las Ventas de Madrid a lo largo de la Feria de San Isidro. Pese a que ha sido un éxito, el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 ha declarado este jueves que «no se refleja» en las estadísticas.

Dato mata relato: la Feria de San Isidro ha mantenido el lleno durante un mes, con un balance final de 564.353 espectadores que disfrutaron de 21 corridas de toros, 3 novilladas y 2 festejos de rejones, lo que se traduce en una media diaria de casi 21.000 personas. Han obtenido el mejor registro de la última década.

Además, la cantidad de gente joven entre el público -a la que Más Madrid amenazó con «comérselos vivos» y calificó de «putos pijos»- ha sido abundante, lo que confirma que afirmar que las nuevas generaciones rechazan la tauromaquia es una falacia. El cartel de «no hay entradas» en la taquilla de Las Ventas se ha dejado ver de forma constante a lo largo del mes y la mitad de las tardes de abono se agotaron todas las localidades.

Pese a ello, Pablo Bustinduy ha decidido obviar los datos y considerar que el lleno en Las Ventas durante la Feria de San Isidro «es algo que no se refleja en las estadísticas de asistencia a estos espectáculos, ni en el número ni en el público». También ha insistido en que los eventos taurinos son «una tortura».

El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 se mostró en contra de la tauromaquia, también públicamente, para apoyar la decisión de Urtasun de suprimir el Premio Nacional de la Tauromaquia en base a una opinión personal, la de que hacerlo «es acorde con los tiempos». Bustinduy declaró que la iniciativa del titular de Cultura era la «acertada».

«Mi posición sobre esto es meridianamente clara. A mí me parece que la tortura, el sufrimiento y la muerte innecesaria de un animal no debería ser objeto de entretenimiento en una sociedad democrática avanzada», ha expresado el ministro de Derechos Sociales este jueves. Las competencias del ministro de Unidas Podemos incluyen los derechos de los animales.

Beneficios económicos

Urtasun reavivó el debate de la tauromaquia a principios de mayo con su censura a la Cultura: el ministro de Sumar suprimió el Premio Nacional de la Tauromaquia creado en 2011 por el socialista José Luis Rodríguez Zapatero. Para justificarse argumentó que los Premios Nacionales son un «fiel reflejo de las valoraciones y sentimientos de la sociedad» y que «en la nueva realidad social y cultural en España la preocupación por el bienestar animal ha ido aumentando».

Además, el ministro aseguró que la asistencia a los espectáculos taurinos era muy baja, solamente del 1,9% de la población. Sin embargo, los datos que aportó se corresponden con el periodo de 2021-2022, una temporada en la que las restricciones por la pandemia seguían vigentes.

Varias comunidades autónomas reaccionaron a la eliminación del premio anunciando la creación de uno propio, entre ellas Castilla-La Mancha, gobernada por el socialista Emiliano García-Page. También lo hizo el presidente de Aragón, Jorge Azcón, que anunció la creación del Premio Nicanor Villalta, e Isabel Díaz Ayuso, que lo pondrá en marcha en Madrid de la mano de la Fundación Toro de Lidia.

Los últimos datos que se aportaron indican que la Feria de San Isidro genera beneficios: se reportaron 70 millones de euros a la Comunidad de Madrid en 2022. Urtasun ha quitado a la tauromaquia los 30.000 euros con los que estaba dotado el premio, que se incluyen en los 65.000 que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) destinan al sector. Son cantidades irrisorias comparadas con lo que aporta: 40 millones de euros al año -en concepto de IVA- por las entradas que se venden.

El impacto económico en 2022 en este sentido fue de casi 400 millones de euros procedentes de un sector que inyecta a las arcas cinco veces más que el cine por el Impuesto de Valor Añadido, pese a que éste último recibió 65 millones de euros en ayudas directas del Gobierno en el mismo año (un 35% más respecto al año de la prepandemia).

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