Girauta: «El catastrofismo climático es un experimento de ingeniería social para debilitar Europa»
"La Agenda 2030 es la plasmación en un ideario político del nuevo comunismo"
"Que Marruecos se haya convertido en el primer exportador de tomates a la UE es parte de un plan perfectamente claro"
Juan Carlos Girauta (Barcelona, 1961) vuelve a la primera línea política tras su paso por Ciudadanos (Cs). Lo hace de la mano de Vox porque ambos partidos coinciden en las «cuestiones importantes», aunque en las listas figura como independiente. Dejó Cs cuando Inés Arrimadas apoyó prorrogar el estado de alarma y ahora busca combatir desde Bruselas la Agenda 2030, el catastrofismo climático, la inmigración ilegal masiva y el wokismo, que ve asomar como el «nuevo comunismo».
Santiago Abascal no le exigió afiliarse a su formación como condición para ir de número tres en las listas al Parlamento Europeo, aunque ya en 2021 se dejó ver en un acto de la fundación del partido. Comparte papeleta con Jorge Buxadé y Hermann Tertsch. «Me importa un comino y me chupa un pie lo que piense de mí la gente de mala fe», dijo en una reciente entrevista con este periódico sobre su integración en Vox. Ahora, a tres días del 9J, vuelve a hablar con OKDIARIO.
PREGUNTA.- ¿Tanto se parecen Vox y Ciudadanos?
RESPUESTA.- Bueno, claro que sí hay coincidencias en cuestiones importantes que siempre he defendido en política. La defensa de la libertad frente al comunismo. Del imperio de la Ley y la Constitución frente al golpismo y el separatismo. De los valores occidentales frente al islamismo radical y terrorista. De la lucha contra el terrorismo en el País Vasco y ahora la lucha por la convivencia frente al modelo de sociedad vasca que quiere Bildu. Y también, por supuesto, la visión de la necesidad de una regeneración democrática en España frente a un bipartidismo de PP y PSOE que ha sido incapaz de hacer frente a la constante amenaza que implica el chantaje institucional y el golpismo de los partidos nacionalistas que buscan la fragmentación de España. Lo vemos hoy en la Ley de Amnistía aprobada por el PSOE y con la connivencia del PP, que podía haberla parado planteando un conflicto institucional Congreso-Senado, conocedor como es de su inconstitucionalidad. Vox nunca habría permitido esto si hubiera tenido mayoría absoluta en el Senado.
P.- Ceuta y Melilla son fronteras de Europa y el grifo migratorio parece que se abre y se cierra al capricho de Mohamed VI, a pesar de los fondos de la UE para contenerlo. La izquierda alemana ya apuesta por deportaciones masivas, pero la española está muy lejos de planteárselo. ¿La amenaza es migratoria o religiosa? ¿Cree que nuestros nietos vivirán el colapso de Europa?
R.- La inmigración ilegal es una de las grandes amenazas para Europa en estos momentos. Lo saben bien los socios europeos del PSOE en Europa. En Alemania, en Francia, en Suecia, en Holanda… La política migratoria de la Unión Europea, con Ursula Von Der Leyen al frente, ha sido de una irresponsabilidad histórica sin precedentes. Por eso desde el bloque de fuerzas conservadoras del que forma parte Vox y el Grupo ECR en el Parlamento Europeo vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para echar a Von Der Leyen y establecer un nuevo rumbo en Europa después de las elecciones del 9J: una Europa de fronteras fuertes como única garantía para la defensa de nuestras libertades y nuestra seguridad.
P.- Naranjas de Egipto, tomates de Marruecos, cebollas de Senegal… Los agricultores españoles siguen tirando sus cosechas. ¿Qué se juegan el sector primario y el mundo rural en estas elecciones europeas?
R.- El sector primario y el mundo rural en Europa se juegan ni más ni menos su futuro. Y no es una exageración. El Pacto Verde y todas las políticas del catastrofismo climático de los últimos años, defendidas por Von Der Leyen como punta de lanza de la coalición PSOE-PP, han sentado las bases para una sustitución de la producción a terceros países. Que Marruecos se haya convertido en el primer exportador de tomates a la Unión Europea, por delante de España, no es una casualidad. Es parte de un plan perfectamente claro. Pero aún estamos a tiempo de revertir esta situación. Es tan sencillo como quitar todas las trabas absurdas que se imponen a nuestros productores y asegurarnos de que los productores de terceros países cumplen como mínimo las mismas condiciones que se imponen a los nuestros. Y para ello sólo hace falta voluntad política. Nosotros lo tenemos claro y por eso somos la alternativa a la coalición PP-PSOE.
P.- La sequía está mermando el campo y el PIB andaluz mira de reojo la previsión de lluvias. ¿El cambio climático es marketing político?
R.- Una cosa es reconocer que el campo andaluz y español enfrenta importantes retos y que las condiciones climáticas son cambiantes, como siempre lo han sido. Y otra es defender un catastrofismo climático como excusa para imponer una ideología que, en realidad, es un experimento de ingeniería social para debilitar a Europa. Nosotros estamos a favor de todas aquellas medidas que mejoren las condiciones de nuestros agricultores y ganaderos, que mejoren sus condiciones competitivas. Por eso defendemos, por ejemplo, inversiones en infraestructuras hidráulicas que les permitan el acceso al agua en las mejores condiciones. El agua es vida. Y sin agua no hay cultivos posibles. Ése es el camino, no la destrucción de presas y embalses como defienden el resto de fuerzas políticas.
P.- Vox dice que PP y PSOE en Europa son lo mismo. ¿Cómo pueden estar tan cerca en Bruselas y tan lejos aquí?
R.- Bueno, porque en el fondo PP y PSOE defienden las mismas ideas. El PSOE tiene la superioridad moral de la izquierda y el PP se ha plegado a ella desde hace muchos años. El PP ha renunciado hace mucho tiempo a la batalla cultural. Ahí vemos las declaraciones de dirigentes del PP como Esteban González Pons o Rosa Estarás, encantados de estar en coalición con los socialistas y defender todas sus políticas ideológicas. Y además se pueden permitir esa coalición porque Bruselas queda muy lejos para la mayoría de españoles. Y se han encargado entre ambos de que el mensaje de Europa no llegue a España. Pero para eso estamos nosotros, para denunciar y contar lo que nadie les ha contado a los españoles en todos estos años.
P.- ¿Cómo explicaría a un extraterrestre lo que es la Agenda 2030 y el wokismo?
R.- La Agenda 2030 es la plasmación en un ideario político del nuevo comunismo. La Agenda 2030 es un plan de control de la sociedad por parte de un modelo de estatalización absoluta y a través de la restricción de libertades. Un plan que necesita acabar con la identidad de cada una de las naciones. Y lo que el wokismo propone es una ideología que es un compendio de todas las luchas que el comunismo ha ido dando con el paso del tiempo, integradas en un solo discurso. Un discurso que hace un uso deliberado de la mentira. Que defiende cosas tan diversas y aparentemente desconectadas como, por ejemplo, la leyenda negra española, el colapso inmediato del planeta por la acción del hombre o la determinación de género por motivaciones contrarias a las biológicas.